El contrato para la gestión de la recogida de residuos urbanos y limpieza viaria se tendrá que prorrogar. No da tiempo a que la nueva concesión esté resuelta e iniciada antes de julio, que es cuando vence el contrato en vigor con Conyser y que se formalizó en 2006. Aún no se han llevado los pliegos con las condiciones del concurso a las comisiones informativas del ayuntamiento y menos al pleno de la corporación local, un trámite al que tiene que seguir un periodo de exposición pública en el que puede haber alegaciones, la presentación de ofertas, las celebraciones de mesas de contratación, el estudio de las propuestas, la adjudicación, la puesta en marcha del servicio..., un proceso que se prolongará más de 5 meses.

De este concurso habló este jueves el concejal de Servicios Públicos, Andrés Licerán, cuando se refirió al dictamen de ayer en la comisión informativa de Contratación de la modificación de la ordenanza de limpieza viaria, texto que recordó que servirá de base para los pliegos del concurso. Es la primera vez que desde el gobierno local se recuerda de forma pública que este año toca volver a sacar a concurso el contrato de concesión del servicio de basura y limpieza.

La adjudicación del nuevo contrato es, al margen de los presupuestos que se tienen que abordar anualmente, la principal decisión que tienen que tomar los miembros de la corporación local en la presente legislatura presidida por el alcalde Luis Salaya.

Es un contrato que si se vuelve a sacar por un periodo de concesión de 15 años, moverá más de 120 millones de euros solo con un cálculo realizado con lo que el ayuntamiento paga ahora anualmente por la recogida de residuos y la limpieza viaria de las calles. La recogida de basura se presupuestó para el ejercicio de 2020 en 2,5 millones de euros, mientras que para la limpieza viaria se calculó un coste de 5,7 millones en las cuentas locales del pasado año, que son las que están en vigor al seguir prorrogado los presupuestos.

Interés

Hace quince años, el plazo de presentación de ofertas estaba abierto el 29 de enero. Ahora ni se han llevado los pliegos a las comisiones informativas. Al anterior concurso se presentaron tres ofertas, dos de grandes grupos empresariales de ámbito estatal (Sufi y Urbaser) y la tercera del grupo cacereño Conyser, que ha ganado todos los concursos que ha convocado el ayuntamiento para la concesión de la recogida de residuos y limpieza.

El de la basura es el segundo contrato de concesión de un servicio en importancia por su coste y personal. Solo lo supera el de abastecimiento y depuración de agua. El tercero es el de los autobuses urbanos. Cuando tocó la renovación del contrato del agua, el proceso se tramitó con un gobierno en mi noría y se prolongó casi un año (a la adjudicación le siguieron recursos ante los tribunales y la anulación de la adjudicación). Cuando tocó la renovación de los autobuses, fue un proceso tramitado con un gobierno con mayoría absoluta y se prolongó poco más de medio año. El de la basura se tiene que renovar ahora con un gobierno local que está en minoría.

Por otra parte, en la comisión informativa de Urbanismo celebrada este jueves se dictaminó a favor del estudio de detalle presentado por el Ministerio de Justicia para ordenar la parcela donde se ampliará el Palacio de Justicia. Es el último trámite previo a que se pueda tramitar por el ministerio la licitación del proyecto y la construcción del nuevo edificio. Del contenido del estudio de detalle informó este diario en su edición del pasado miércoles. El concejal delegado de Urbanismo, José Ramón Bello, destacó, tras la celebración de la comisión informativa, que hubiese salido adelante el estudio de detalle de la ampliación porque supondrá «una importante inversión en la ciudad que traerá consigo la creación de puestos de trabajo».