El Corte Inglés aseguró en la tarde de ayer que solo está interesado en la recalificación del solar de las Carmelitas en lo relativo a la construcción de su gran almacén, matizó que es "ajeno al resto de usos edificatorios" (el nuevo colegio y el bloque de 100 viviendas) y anunció que se mantendrá al margen de la polémica suscitada en la región. Asimismo, recordó que el contrato suscrito con Estudios Urbanísticos y Medio Ambientales SL, que expira el próximo 31 de diciembre, tiene "condiciones suspensivas".

Con un escueto comunicado, la Dirección de Comunicación del grupo comercial puso fin a casi un año de silencio sobre el futuro de su proyecto en Cáceres. La última vez que un responsable de la cadena habló de él fue en la inauguración del Supercor del R-66, en diciembre del 2005. EL PERIODICO preguntó por escrito el 2 de noviembre a la empresa sobre distintas cuestiones vinculadas al futuro de la operación y a su participación. La compañía no ha contestado aún a estos interrogantes. En el texto de su respuesta de ayer sí deja claro que "solo está interesada en la modificación de aquellos aspectos del planeamiento urbano que propiciarán la implantación del centro".

Por su parte, Jesús Alarcón, representante de la sociedad Estudios Urbanísticos y Medio Ambientales que participa en la operación en el solar de las Carmelitas, insistió ayer en que la operación como se regula en el convenio "no es un pelotazo, es un negocio normal, en el que tras una inversión y un esfuerzo importante se obtienen unos beneficios". Alarcón se ofreció a "dialogar y debatir" con el PSOE el contenido de la operación y del convenio y pidió al alcalde, José María Saponi, que acepte el concejal ofrecido por el PSOE por "el interés general" de la ciudad