«Después de prometer un refuerzo que no llega y proponer limitaciones al aforo que no se cumplen, está es la situación para ir a clase». Este testimonio ilustraba este miércoles una imagen de una aglomeración de alumnos a primera hora de la mañana que aguardaban para usar el autobús al campus universitario en la parada de la Cruz de los Caídos. Así, a través de redes, denunciaba de nuevo la plataforma Estudiantes en movimiento de Cáceres la situación de riesgo que se produce por las aglomeraciones en horas puntas a la universidad y criticaba que las medidas que se han puesto en marcha esta semana para solventar el problema no han conseguido poner fin a la congestión que se produce cada mañana en el transporte público que conduce a las facultades.

En ese sentido, la plataforma estudiantil lamentó que las propuestas que se han puesto en marcha esta semana tras las protestas de los alumnos de la universidad son «insuficientes» y piden, entre otras medidas, que se haga un control «real» de aforo, que el refuerzo acordado se centre en las ‘horas punta’ y que haya más autobuses durante la jornada.

Cabe recordar que el ayuntamiento, con carácter urgente, aprobó el viernes que la línea Campus contara con tres autobuses más en el servicio para intentar paliar las aglomeraciones en la entrada y salida de las clases. Esta medida se acordó tras una reunión que mantuvieron el regidor municipal y el rector de la Universidad de Extremadura, Antonio Hidalgo, en el ayuntamiento antes de que comenzara el curso para perfilar los protocolos para que las clases en la universidad arrancaran con todas las garantías sanitarias.

En cualquier caso, el alcalde, Luis Salaya, en declaraciones a los medios este lunes, insistió en que la actuación de la administración local se encuentra al «límite del esfuerzo» y descartó que se vayan a poner en funcionamiento más autobuses. En ese sentido, volvió a incidir en que «una parte muy importante de los desplazamientos a la universidad se aglomeran en una hora del día y eso significa que la entrada a clase no está suficientemente escalonada». De este modo, avanzó que esta misma semana el ayuntamiento ha remitido a la universidad una nueva petición para que revisen los horarios de entrada y salida y de esta manera no coincidan en el inicio y fin de las clases para todas las facultades. También puso sobre la mesa Salaya la posibilidad de que se reduzca la presencialidad a las clases.

Sobre este asunto, en un primer momento el rectorado ya aseguró que los horarios están debidamente ajustados, no obstante, este diario se puso en contacto con la universidad para conocer la respuesta de la universidad extremeña a esta segunda petición pero no obtuvo respuesta.