El juicio celebrado ayer en la Audiencia por el secuestro y robo a un taxista fue un constante cruce de acusaciones entre los dos acusados. Mientras que Alejandro C. P. aseguró que no sabía lo que tenía previsto hacer Brígido M. R., éste afirmó que todo lo habían planeado los dos juntos.

Alejandro C. manifestó que Brígido le había llamado para que le acompañara hasta Arroyomolinos donde tenía un familiar que les daría dinero para droga. "Al llegar a Montánchez me dijo que se había quedado sin gasolina y que llamaríamos a un taxi, y luego me sorprendió sacando una pistola y amenazando al taxista para robarle". Reconoció que él colaboró, que fue el que le ató al árbol donde le dejaron abandonado, "pero lo hice por miedo a Brígido", aseguró.

Por su parte, Brígido M. reconoció que fue él quien propuso atracar a un taxista para conseguir dinero para droga, "pero Alejandro estuvo en todo momento de acuerdo y planeamos juntos la forma de hacerlo".

Su víctima señaló a los dos acusados como las personas que en la tarde del 17 de julio del 2004 le amenazaron con una pistola y un cuchillo y tras robarle le dejaron abandonado atado en un árbol. Reconoció que Brígido --al que él se refería como el mayor-- era el que daba las órdenes, y que "el joven actuaba un poco nervioso", pero no supo precisar si era por temor a su compinche o por su "menor experiencia", como alegó la fiscal.

PETICION DE PENAS La fiscal, entendiendo lógico que Brígido M. fuera "el cerebro", pues según señaló "le constan 25 antecendentes por robo con intimidación, muchos de ellos a taxistas", consideró probado que Alejandro C. actuó "voluntariamente".

Por ello, como ya adelantó ayer este diario, solicitó para cada uno 11 años de prisión --5 por el delito de robo violento con el agravante de uso de armas y 6 por el de detención ilegal--.

El abogado de Alejandro C. pidió su absolución, por considerar probado que actuó "obligado por Brígido, que incluso llegó a amenazarle con la pistola si no hacía lo que le decía". Y el de Brígido M. solicitó para éste sólo un año de prisión, al estimar de aplicación la eximente incompleta por su toxicomanía.