No cabe duda de que una de las actitudes que definen las características de los ciudadanos cacereños es su peculiar manera de entender la religiosidad, que llega a su culmen durante la Semana Santa y los nueve días de la novena a la Virgen de la Montaña. Digo que es peculiar porque no parece que la religiosidad se vea igualmente manifestada diariamente con la práctica religiosa. Sin embargo no es solo esta manifestación quien define a los cacereños. La semana pasada hemos disfrutado de la Feria del Libro de cuyo éxito se hacen lenguas los agentes oficiales y los libreros. La caseta en la que se han celebrado las presentaciones han estado llenas en muchas ocasiones y no solo cuando el escritor era notablemente mediático y el desfilar de paseantes y curiosos que se han detenido ante las estanterías de las librerías ha sido incesante. No tengo datos de las ventas pero supongo que habrán sido una suficiente explicación de que la lectura forma parte de la vida de una gran parte de nuestros paisanos. La lectura y también la escritura pues no son pocos los que dedican mucho tiempo de su ocio a escribir. Los menos con ánimo de publicar, como ha quedado demostrado en la mencionada feria, y otros que por falta de medios, aunque no faltan editoras, por pudor o quizás por no valorar suficientemente su trabajo, lo dejan dormir entre sus intimidades y del que solamente dan cuenta a veces a sus amigos y familiares. Rara es la semana en la que no hay una o dos presentaciones de libros de autores cacereños en alguno de los muchos centros culturales de nuestra ciudad. Las exposiciones de las más diversas artes, pintura, escultura, fotografía, etc, proliferan y se ven complementadas por charlas, conferencias y coloquios. La mayoría de los ponentes foráneos que vienen al Ateneo se muestran sorprendidos de que en una ciudad tan pequeña exista tanta actividad cultural pues, pese a lo que se diga, todo el que quiera tener acceso a la cultura tiene en Cáceres la oportunidad de lograrlo diariamente sin necesidad de buscar mucho. Esto me hace estar orgulloso de ser ciudadano de Cáceres.