Tras meses de parón en los actos culturales debido al Estado de Alarma y confinamiento, Cáceres empieza a tener más movimiento en cuanto a exposiciones, adaptándose a la nueva normalidad y a sus medidas de protección. Poco a poco el arte regresa a la capital cacereña y los museos y centros culturales han reabierto sus puertas.

Uno de los entretenimientos que ofrece la ciudad son las galerías y exhibiciones de arte; tanto al aire libre como en salas interiores, la mayoría con entrada gratuita. Así, una de las recopilaciones de arte que se puede disfrutar en la calle es la titulada ‘Desde mi balcón’, organizada por PhotoEspaña, que llena ventanas y balcones de la plaza Mayor y alrededores de fotografías realizadas por los vecinos durante los meses de confinamiento.

En el caso de las salas interiores, las visitas se han adaptado a las medidas impuestas por el Gobierno, como el uso obligatorio de mascarillas, aforo limitado en las salas y el mantenimiento de la distancia social. Uno de estos centros que ha abierto ha sido el espacio de arte y creación Belleartes, en la calle Donoso Cortés, donde hasta ayer se ha podido disfrutar de la exposición de pinturas negras ‘Stigma’, del joven artista cacereño Paul Eme.

También se pueden visitar las dos exposiciones del Palacio de la Isla, organizadas por la Junta de Extremadura. Una de ellas es el collage creado por Pedro de las Heras como homenaje al poeta y prosista extremeño Manuel Pacheco; y la otra, ‘Haciendo Europa desde Cáceres’, una compilación de veinte obras impresas en metacrilato que han participado en diferentes certámenes de Europe Direct. La muestra busca representar en forma de fotografía «el hecho europeo» desde un punto de vista artístico y simbólico. Las dos exposiciones estarán abiertas por las mañanas durante todo el mes, con aforo limitado.

El mundo de la cultura vuelve así a abrirse en un momento de debate sobre si es adecuado retomar la normalidad, dada la situación de riesgo que vivimos. Las dudas están en la calle, lo dice la cacereña Manuela Gutiérrez: «Me gustan las exposiciones pero hora no es momento aunque, si se cumplen las medidas de seguridad, puede ser un buen entretenimiento».