«Yo no quiero trabajar fuera de mi tierra», se dijo Sandra Morán Caldera tras dos años en Madrid. Se trata de una joven de 31 años nacida en Plasencia y afincada en Cáceres desde hace cinco años. Estudió Publicidad y Relaciones Públicas en la Universidad de Segovia. Al finalizar se marchó a la capital española de becaria a una agencia publicitaria. Allí estuvo seis meses compaginando las prácticas con un empleo de azafata en Ikea. Después, trabajó en otra empresa de publicidad, pero se dio cuenta de que no quería continuar allí, «lo que quería era volver a Extremadura», cuenta.

A su vuelta residió tan solo cuatro meses en Plasencia. No tardó en hacer las maletas y trasladarse a la capital cacereña, donde a los pocos meses encontró un empleo de ilustradora en un diario local. Empresa en la que ejerció su trabajo durante dos años. Al poco tiempo diseñó campañas publicitarias a establecimientos cacereños de diferentes sectores. También ilustró revistas y un libro, lo que le impulsó, después de algunos meses en el paro, a darse de alta como autónoma. «Tenía clientes, era el momento».

Sin embargo, en septiembre de 2018 una idea emprendedora invadió su pensamiento. Quería llevar sus ilustraciones «más allá». Con esa premisa nació Ilustresia, nombre que surge de una conversación con su hermana y su pareja. Reivindicar a través de sus ilustraciones y la cultura popular de Extremadura era su principal objetivo. «Quería que los dibujos significaran una lucha y al mismo tiempo que se notaran tintes extremeños». Por ello, se inició en el sector textil elaborando camisetas y más productos con sus imágenes. Para el día 8 de marzo realizó una ilustración en la que aparece una mujer con el puño en alto que luce una gorra de montehermoseña. El dibujo invadió las redes sociales y consiguió un aluvión de me gustas. A raíz de esta surgieron otras que ponían en valor el empoderamiento de la mujer.

No obstante, confiesa que en estos momentos se encuentra «en un avión que está despegando». Y lo hace en Cáceres, «una ciudad que ofrece oportunidades si se buscan». Sandra le echó valor y asegura que estar rodeada de personas que tienen conocimiento en diversos sectores le ha ayudado mucho a regentar su empresa. «Pedir ayuda es lo más inteligente», aconseja a los jóvenes. Igualmente, considera que ayudas, en general, «es lo que falta».

Ahora Ilustresia tiene demanda de productos que se distribuyen a través de redes sociales. Por el momento han recalado en Asturias y Galicia y cómo no, en varias localidades de la región.