«Yo bailo para reírme del rayo». Aplausos. Con esta sentencia cerró su número una de las bailarinas en San Jorge. La plaza cacereña, en pleno corazón de la ciudad monumental, fue escenario este fin de semana para mostrar el talento nacional de la danza. Durante sábado y domingo, el festival Dzn quiso salir a la calle y presentó ante un aforo limitado a medio centenar de personas y medidas de seguridad una muestra de breves performances de una decena de compañías de danza del país a lo largo de la mañana.

La cita, que cumple diecinueve años desde que nació en 2001 para visibilizar la creación que surgía en la Universidad de Extremadura a través de la Asociación Cultural Aula de Danza, ha readaptado su formato a la situación actual derivada del coronavirus. Según expone a este diario Álvaro Murillo, uno de sus organizadores, este año el festival extiende su programación a cuatro meses, de septiembre hasta finales de año, en lugar de los habituales diez días de diciembre, y no cuenta con compañías de fuera de la península. Del mismo modo, el Danzamaratón, uno de las actividades más multitudinarias que tiene lugar en el Gran Teatro, se celebra en formato ‘online’.

En cuanto al primer balance de los tres meses, Murillo destaca el apoyo de las administraciones para llevar a cabo la edición con todas las garantías y pone de relieve que el nuevo formato sin actividades concentradas en una sola semana ha permitido que pueda asistir más público que en años anteriores. «Las actividades en la calle están teniendo éxito y los talleres que se han hecho han llenado», sostiene.

Con respecto a las próximas actividades el 3 y 4 de diciembre se proyectará en la filmoteca ‘Solo nos queda bailar’ y ‘El bailarín’, respectivamente, y el Gran Teatro acogerá los espectáculos ‘The Passenger (UEx Dance Project)’ el 10 de diciembre, ‘Flamencas’ el 12 de diciembre y ‘#QueOscurezca’ un día después. Cerrará el programa el Danzamaratón virtual el 19 y 20 de diciembre.