´Ayúdenos a prevenir el fraude´ es el lema de la campaña que el sistema de pago Euro 6000 realiza estos días en Cáceres. Dirigida fundamentalmente al comercio, a través de ella se ofrecen 10 medidas básicas de seguridad para el pago con tarjeta, diez medidas que se han de tener en cuenta si se quiere evitar que a uno le estafen con el dinero de plástico .

"Se trata de evitar que quien ha robado una tarjeta de crédito o quien la ha falsificado, hechos cada vez más frecuentes, pueda comprar sin obstáculos, que el comerciante impida que le estafen".

Así, el comerciante ha de iniciar el decálogo de la seguridad comprobando algunos aspectos de la propia tarjeta. En primer lugar, la autenticidad del holograma de la misma; primera medida a la que sigue, en segundo lugar, el verificar que el relieve de la tarjeta, si lo tuviera, es uniforme; y examinar, en tercer lugar, que el carácter de seguridad de ella es el correcto. Y si se dispone de una lámpara de rayos ultravioletas "resulta conveniente asegurarse de que aparecen las marcas autenticadoras en el anverso de la tarjeta".

Con respecto al cliente, el decálogo de seguridad advierte la necesidad de acreditar la identidad del titular de la tarjeta mediante el DNI o el pasaporte; anotar estos datos en el recibo de venta; comparar la firma del recibo con la de la tarjeta, asegurándose de que el panel de firmas no haya sido manipulado o emborronado; "y contactar con su caja si el cliente, la tarjeta o la operación le parecen sospechosas".

Además, se advierte de la conveniencia de controlar que el número de tarjeta y fecha de caducidad del recibo coinciden con los que figuran en la tarjeta y extremar las precauciones si la operación se realiza sin lectura de banda magnética.