Una decena de empresas, entre ellas la software factory de INSA- IBM, ya han confirmado su interés por asentarse en la sede cacereña del Parque Científico y Tecnológico de Extremadura (habrá otra en Badajoz), que se abrirá en la primavera del 2011 en un edificio sostenible a la entrada del campus, previsiblemente con un 70% de ocupación desde el inicio. Así lo ha avanzado la Junta, que gestiona el proyecto junto con la Universidad de Extremadura a través de una fundación. Pretende ser un centro de referencia en investigación y desarrollo, una macrosede para firmas innovadoras, un espacio de encuentro entre empresas y Universidad para impulsar con sus proyectos el tejido social y económico.

Según ha desvelado a este periódico el director general del área, Antonio Verde, desde hace un año se están llevando a cabo contactos con una treintena de empresas interesadas en entrar en el parque, la mayoría del sector de las TIC (tecnologías de la información y la comunicación). De ellas, una decena ya han dado el , algunas incluso han firmado un precontrato, y entre 5 y 6 más se dan casi por seguras para cuando se inaugure. "Estamos razonablemente satisfechos, llevamos un buen ritmo pese a la situación económica delicada que en general atraviesan las empresas. A un año vista de la apertura, vamos como debemos ir, no podemos acelerar más", explica el responsable.

Atractivos no faltan. Estos parques tienen una concepción beneficiosa para las empresas, ya que cada una dispondrá de su propio espacio además de estancias y prestaciones comunes, desde salas de reuniones hasta equipamiento tecnológico o servicios de asesoría y desarrollo de proyectos. La sede cacereña tendrá 4.000 metros cuadrados y en ella se dará una especial simbiosis entre las propias empresas y a su vez con la Universidad (los estudiantes podrán trabajar para esas firmas o bien crear una propia), de modo que exista un intercambio de creatividad, conocimientos y experiencias.

En definitiva, el parque se concibe como un núcleo de investigación y dinamización tecnológica. En un año de gestiones ya se han comprometido numerosas empresas: una decena para Cáceres y alrededor de 25 para Badajoz. Otras lo harán con seguridad en los próximos meses.

¿QUIENES VIENEN? El plato fuerte o la lanzadera del parque será la planta cacereña de INSA-IBM, que espera trasladarse en cuanto sea posible para paliar la falta de espacio que sufre actualmente en Las Capellanías. En segundo lugar, según explica Antonio Verde, existe un grupo de firmas procedentes de fuera de Extremadura que también han confirmado su entrada en el parque, todas de base tecnológica. La primera, Wireless Mundi , se dedica a soluciones de ofimática, de voz y datos, para las pequeñas y medianas empresas (Internet, uso intensivo de nuevas tecnologías, seguridad integral...). Está participada por la sociedad pública Fomento de Emprendedores Extremeños, vinculada a la Junta de Extremadura. Ya funciona con una sede provisional.

También estará Quota Soluctions , una firma que explotará un modelo poco asentado en España pero con mucha proyección en otros países, sobre todo en los anglosajones, ya que supera el 10% de la facturación global en programación informática. Se trata del software as services o software alquilado , un servicio que permite a las empresas utilizar programas de gestión de todo tipo a cambio de una cuota. También cuenta con el apoyo de Fomento de Emprendedores y espera crear alrededor de quince puestos de trabajo cualificados.

Asimismo, la firma madrileña Gamma Soluctions entrará en el parque cacereño para desarrollar desde allí sus programas informáticos aplicados a las energías renovables. Estos negocios que llegan de fuera suponen una aportación especial, ya que incorporan un valor añadido a la región (beneficios, empleo...). "Buscan en Extremadura lo que cualquier empresa cuando se mueve, ganar dinero, y para ello necesitan tejido, talento y capital", explica Antonio Verde. "Aquí tenemos todo, --continúa--, hay empresas capaces de cooperar con ellas (pymes, renovables...), hay mano de obra cualificada además de la universidad, y la Administración discierne los buenos proyectos para apoyarlos". El director general reitera que "vienen para quedarse".

También hay varias empresas cacereñas confirmadas, aunque algunas no quieren revelar su identidad por cuestiones empresariales hasta la inauguración. Por ejemplo, Homeria Open Soluctions , creada en la Universidad de Extremadura por estudiantes y profesores, y especializada en herramientas de software avanzado que mejoran la gestión empresarial. Esta empresa ya se encuentra en la denominada preincumbadora de la Uex a la espera del parque. El resto de las firmas cacereñas se dedican a veterinaria, consultoría, investigación en desarrollo e innovación, y sobre todo TIC.

Los responsables de la doble sede del parque extremeño tienen experiencias previas en estos proyectos y aseguran que son complicados, pero merecen la pena. "Desarrollar un parque tecnológico en su primera fase cuesta alrededor de 10 años porque unas empresas triunfan otras fracasan, hay que avanzar, hay que madurar...", explica el director general. "Aquí hemos arrancado tarde pero ya vamos a velocidad de convergencia --prosigue--, y en menos de 5 años cumpliremos con lo previsto en nuestro plan tecnológico", concluye Antonio Verde.