La delegada del Gobierno en Extremadura, Cristina Herrera, ha manifestado hoy que "todas las posibilidades están abiertas" en la muerte ayer de la vecina de Arroyo de la Luz Sofía Tato a mano presuntamente de su marido, pero sí ha asegurado que "se trata de un caso de violencia de género".

Herrera, que ha participado hoy Cáceres en el minuto de silencio convocado por el asesinato de esta mujer, ha asegurado que se mantienen todas las hipótesis del caso, "tanto que fuera la mujer la primera atacante, que se defendiera ella o que lo hiciera él, e incluso "tampoco se ha descartado" que el detenido se haya podido autolesionar".

A este respecto, ha dicho que estaba previsto tomar declaración hoy al detenido, que está ingresado en el Hospital San Pedro de Alcántara para tratarle las heridas por arma blanca que presentaba, aunque "todavía no sabe si esto se hará en el día de hoy".

"Los hechos todavía no están claros y hay secreto de actuaciones", ya que todavía no se ha decretado secreto de sumario debido a que las diligencias no han sido entregadas en el juzgado número de Cáceres, que es el que ayer estaba de Guardia Número 3.

"Se están realizando muchas gestiones, no solo recabar testimonios si no también distintas documentaciones para poder aclarar esta situación", ha aclarado, que ha insistido en que debe haber "una investigación policial minuciosa para esclarecer cómo sucedieron los hechos realmente".

La delegada ha pedido "no hacer más conjeturas de las que ya han podido surgir de los vecinos de Arroyo de la Luz y de las familias de uno y otro lado" y desea que se tenga cuidado porque esa familia tiene hijas "y pueden recibir un tipo de información o valoración que les desagrade cuando sea mayores".

"Tendrán que ser los forenses los que esclarezcan cómo pudieron acaecer los hechos", ha subrayado Herrera, que ha añadido que lo que que hay que lamentar "es la desgracia de que otra mujer más, una joven de 42 años, haya muerto a manos de su marido".

"Es un día triste para Extremadura y demostramos nuestra más enérgica repulsa contra esta lacra social, que es la muerte de mujeres a manos de sus parejas, exparejas o maridos", ha indicado.

Cristina Herrera ha mostrado su solidaridad a la familia y a los hijos y esperar que cada vez haya menos casos de este tipo.

Al minuto de silencio realizado a las puertas de la subdelegación del Gobierno en Cáceres también se ha unido el subdelegado, José Carlos Bote; y el alcalde en funciones, Laureano León.