La Junta de Extremadura procedió ayer al desalojo de los inquilinos de una casa ocupada ilegalmente en Aldea Moret, zona de la ciudad donde se concentra el mayor número de pisos de promoción pública. Lejos de tratarse de una cuestión de impagos, el piso había sido ocupado por unas personas de manera ilícita, si bien ayer, a la llegada de los agentes de la Policía Nacional, la casa se encontraba vacía.

Los hechos tuvieron lugar alrededor de las 10.30 horas, cuando se desplazó hasta el número 9 de la calle Germán Sellers de Paz --dirección donde se encuentra el inmueble--, una furgoneta de la Policía Nacional. Los agentes precintaron parte de la vía mientras se prolongó el desalojo, el cual, al no haber nadie en esos momentos en el interior de la vivienda, transcurrió sin incidencias.

El piso, que corresponde a una de las 667 viviendas sociales que la Administración Regional promovió en su día en la barriada, fue precintado ayer a cargo de la Brigada de Estupefacientes de la Policía Nacional, que fue la unidad encargada de intervenir, de cara a evitar que otras personas puedan ocuparlo de manera ilegal en un futuro próximo.

Además del caso mencionado, otra vivienda vacía en Aldea Moret también fue recuperada ayer por el gobierno regional.

La Junta de Extremadura confirmó en febrero de este año que tenía pendientes 230 expedientes de desalojos por impago que debían ser estudiados en la mesa de trabajo, creada con el objetivo de aumentar las garantías de que no se echa de una vivienda de promoción pública a familias sin recursos o en situación de exclusión social. No obstante, de esos 230 expedientes, 12 de ellos obedecían a conductas asociales, ocupaciones ilegales o pisos vacíos, grupo al que podrían corresponder los casos de ayer.