Ser destino turístico de calidad certificada no es fácil. Hay que pasar una serie de inspecciones, exámenes y controles de auditores expertos en calidad que valoran las "buenas prácticas" de cada establecimiento en su servicio y atención al turismo. El premio es un distintivo que otorga la Secretaría de Estado de Turismo y que después lucen los establecimientos como lugar recomendado .

Cáceres tiene ya treinta establecimientos públicos y privados de calidad garantizada con sello oficial. Son ocho hoteles, ocho centros informativo o museos públicos, seis restaurantes, cuatro bares, tres comercios turísticos y hasta una empresa de congresos --ver listado anexo--.

Todos ellos han sido evaluados por el Sistema Integral de Calidad Turística en Destino (Sicted), un organismo vinculado al Plan de Excelencia Turística que desarrolla el Ayuntamiento de Cáceres en colaboración con la Secretaría General de Turismo. Esta iniciativa se ha llevado a cabo en otros 52 localidad españolas más.

Elección y descartados

La elección de estos lugares no ha sido aleatoria. Primero fueron ellos los que optaron a la convocatoria ofrecida por el ayuntamiento y, tras someterse a diversos controles e inspecciones, además de jornadas formativas, se les concedió el sello de calidad, que podrán lucir desde finales de este mes.

En el camino quedaron otros doce establecimientos que no lo consiguieron. Seis se retiraron voluntariamente y otros seis, que no superaron los sistemas de evaluación, pasarán a una segunda convocatoria. Está previsto que a esa nueva fase se presenten los guías turísticos y la policía local, además de otros locales de hostelería que deseen ostentar el distintivo.

Este sello pretende ser un aval hacia el turismo y hacia los propios cacereños y obliga a los poseedores a no bajar la guardia en la calidad de sus servicios. Esa es la mejor garantía para que el turista vuelva o recomiende la ciudad.