El robo al descuido de bolsos y carteras, y el posterior uso de los documentos que conseguía para extraer dinero de las cuentas de sus titulares, tanto en cajeros automáticos como, incluso, en las propias ventanillas de las entidades bancarias, era la ocupación de A. M. F. P., una conocida carterista de la ciudad a la que la Policía Nacional ha logrado detener. Se la acusa de una estafa de más de 4.500 euros, así como de un delito de usurpación de la identidad de otra persona para cometerla.

A la detenida, de 40 años, natural de la localidad pacense de Arroyo de San Serván, pero residente desde hace años en Cáceres, ya le constaban numerosos antecedentes penales. Incluso, según información policial facilitada ayer a este diario, en los últimos seis meses había sido detenida en al menos cinco ocasiones. Pero los hechos por los que ahora ha sido detenida, y por los que el juez ha declarado su ingreso en prisión provisional, ocurrieron en el pasado mes de julio.

A mediados del citado mes, una mujer denunciaba en la Comisaría la sustracción de un monedero con distinta documentación y, unos días después, la extracción fraudulenta de una gran cantidad de dinero de su cuenta bancaria.

Ante estos hechos, el Grupo de Delincuencia Especializada y Violenta de la Comisaría puso en marcha, de forma inmediata, una investigación para la identificación, localización y detención del autor.

BIEN PREPARADA Los investigadores, junto con el departamento de seguridad del banco, confirmaron que una mujer, tras mostrar el DNI arrebatado a la titular de la cuenta, "mostrando la misma apariencia física que la fotografía del documento de identidad, tras cortarse, teñirse el pelo y acicalarse para no levantar sospecha entre los empleados de la entidad", había logrado extraer los más de 4.500 euros en la ventanilla.

Tras las pesquisas policiales, se logró identificar y detener a la responsable de los hechos, la citada A. M. F. P., "una conocida carterista que en este mismo año ha sido detenida en otras cinco ocasiones por hechos de similares". En estas ocasiones anteriores había conseguido, de la misma forma, haciéndose pasar por las titulares de los documentos robados, una cantidad total de otros 4.000 euros.