Detenido por atracar haciéndose pasar por policía. La Jefatura Superior de Policía de Extremadura informó ayer de la detención en Mérida de un joven de 25 años, con antecendentes policiales, a quien se atribuyen dos robos con intimidación cometidos en noviembre del año pasado en la capital cacereña, además de un delito de usurpación de funciones públicas.

Según precisaron fuentes policiales, el presunto autor de los hechos, en compañía de otros dos, se hacían pasar por policías de paisano para atracar a sus víctimas. El primer robo se produjo en la noche del pasado 8 de noviembre en la calle Santa Joaquina de Vedruna. Intimidaron a su víctima, cacheándola y golpeándola en la cara para sustraerle dinero y un móvil.

El segundo atraco se produjo poco después en la plaza del Duque con el mismo modus operandi , esta vez para robar también dinero y dos móviles a otra persona. Fue precisamente gracias a uno de los teléfonos robados cómo la policía logró localizar al presunto autor de los hechos, ya que el terminal estaba siendo utilizado por la compañera sentimental del detenido, a quien se le imputa un delito de receptación. La operación policial continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.

LLOPIS Por otro lado, dos hombres fueron detenidos el pasado jueves como presuntos autores de un robo con fuerza en un establecimiento de Llopis Ivorra. Ambos fueron localizados por la Policía Nacional en las inmediaciones de la calle Perú, donde un vecino había escuchado un fuerte ruido, observando a dos individuos, vestidos con camisetas negras, salir por la ventana de uno de los negocios de la zona.

Los agentes desplazados lograron dar con ellos y procedieron a identificarles, comprobando que la tienda en la que presuntamente se cometió el robo tenía los cristales de la puerta y varios barrotes fracturados, y que los objetos que portaban en una bolsa y habían intentado ocultar procedían de ese negocio.

Los efectos que habían sustraído eran el cajetín de la caja registradora, 57 paquetes de tabaco y varias botellas de whisky. Los detenidos son dos varones, con domicilio en Cáceres, de 48 y 43 años de edad, y con múltiples antecedentes penales por delitos contra el patrimonio.

Por otro lado, la Policía Nacional también detuvo en Talayuela a un varón, de nacionalidad marroquí, por falsificación documental y estancia irregular. Pagó 1.800 euros a un compatriota por lograr un contrato de trabajo y un certificado de empadronamiento falsos, con los que había logrado obtener la autorización de residencia.