La diputación tendrá mano dura con los bomberos que profirieron insultos en el pleno del pasado viernes contra el presidente provincial Juan Andrés Tovar y el diputado del Sepei, José Félix Olivenza. Este último aseguró ayer que "no queda más remedio que abrir expedientes" y desveló que "se están produciendo amenazas, insultos y destrozos en taquillas" de algunos agentes que no secundaron la huelga de hambre en noviembre pasado. "No vamos a consentir lo más mínimo", subrayó.

Asimismo, avanzó que se están analizando las cintas del pleno para identificar a los responsables de los insultos e indicó que, en caso de lograrlo, presentarán también denuncias "por insultos y amenazas" en la comisaría. Las sanciones también afectarán a los trabajadores que acudieron de uniforme, aunque no precisó en qué consistirán "porque dependen del instructor del expediente".

En este sentido, Olivenza culpó al PP de los incidentes, le acusó de "provocar" a los bomberos y de desconocer el contenido del presupuesto en el que aparecen reflejadas varias partidas para el Sepei en el 2006. Negó que hubiera pactado la salida del jefe de servicio y fue rotundo al afirmar que no habrá ninguna dimisión: "No voy a dimitir. Al contrario. Es un reto más y sería una cobardía irme ahora". Olivenza fue taxativo al afirmar que "una parte del colectivo está mediatizado políticamente por el PP".

TRES PARQUES Asimismo, insistió en que el compromiso alcanzado con los bomberos contempla, en los próximos cuatro años, la construcción de tres nuevos parques de bomberos y dotarles de personal durante ese período. "Nuestra intención en el 2006 es construir un parque y está plasmado en una partida presupuestaria". Olivenza añadió que la ubicación dependerá de estudios técnicos y que la dotación de personal se haría con interinos en el 2007.

Asimismo, reconoció que su intención es utilizar a bomberos forestales para atender incendios urbanos, aunque esta medida, dijo, se pondría en marcha en los parques ya creados. "Les reciclaríamos y les daríamos formación y, lógicamente, haciendo un proceso para funcionarizarles porque, de lo contrario, como laborales no podrían actuar", subrayó. Estos bomberos pasarían de ser fijos discontinuos a personal fijo: "Tendrían que pasar por una oposición o un concurso para consolidar su plaza", aseguró.

Asimismo, avanzó que estudia cambiar los turnos de 24 horas a "siete o 12 horas como máximo" y que "ésta es la razón del malestar de los bomberos". La medida, dijo, "permitiría atender cualquier siniestro con agilidad y contratar a más gente".