El propietario del bar de la calle Pizarro el Escudo de Oro, J. V. C., ha sido absuelto del delito contra la salud pública por tráfico de droga que se le imputaba y por el que fue juzgado la semana pasada, según una sentencia de la Audiencia Provincial que se hizo pública ayer. La Fiscalía solicitaba para él nueve años y un día de prisión.

El tribunal entiende que, a pesar del volumen de droga intervenido en el bar por la Policía Nacional (7,90 gramos de cocaína y 153 gramos de hachís), no se puede probar que esta sustancia estaba destinada a la venta a terceros, sino que esta cantidad "concuerda" con el acopio de un consumidor como el acusado.

En este sentido, cree que no es suficiente como "prueba incriminatoria de cargo" el testimonio de la policía para inculpar al propietario del bar. "Todo son suposiciones y conjeturas (de la policía)", dice el magistrado ponente del fallo judicial, que deja entrever una deficiente actuación policial, ya que un delito de esa naturaleza debe ser "probado de forma suficiente". La policía no detuvo a nadie saliendo del bar con droga y los clientes a los que se incautó alguna cantidad no reconocieron haberla comprado en él.