La Sala Capitol acoge hasta el 29 de agosto una exposición fotográfica denominada Emergencia: los efectos del cambio climático , que refleja la dramática situación que la tormenta Noel dejó a su paso por el Caribe en el mes de octubre del año pasado. Las instantáneas fueron tomadas por el fotógrafo Sergio Alvarez Ferrera, que además ejerce como cooperante en la región a través de la Asamblea de Cooperación por la Paz.

La principal actividad de esta organización no gubernamental es la de prestar ayuda y apoyo a aquellos afectados por catástrofes naturales, crisis humanitarias o conflictos armados. De hecho, el objetivo básico de este evento consiste en concienciar a los visitantes de la realidad que viven los países del Sur, y la región del Caribe en particular, aunque sobre todo pretende alertar sobre los peligros del cambio climático, cuyas consecuencias se acentúan en aquellos estados en vías de desarrollo que no tienen medios para combatir los fenómenos meteorológicos, según alertan los responsables de la organización.

Asamblea de Cooperación por la Paz pone al alcance de todos los visitantes diversas copias de las instantáneas de la muestra, que se venderán para obtener fondos que permitan desarrollar nuevos proyectos de ayuda y cooperación en las regiones afectadas por la tormenta Noel, en especial en Haití y República Dominicana, países en los que se concentra la mayor parte de la actividad que desarrolla dicho colectivo.

Mejorar condiciones

Asamblea de Cooperación por la Paz trabaja en Sudamérica --con más frecuencia en Haití y en República Dominicana-- desde 1995, con el objetivo de mejorar las condiciones de vida de los grupos de población más desfavorecidos y en colaboración activa con organizaciones y autoridades locales. Las labores de ayuda se centran en la asistencia y acogida en casos especialmente dramáticos, como suelen ser los ocasionados por desastres de origen natural.

Entre los principales trabajos que la organización lleva a cabo en estos países, destacan la reconstrucción de viviendas, el suministro de provisiones, la limpieza de carreteras y la construcción de refugios temporales. En definitiva, una serie de medidas de emergencia que en general tratan de minimizar el impacto de este tipo de catástrofes.

La delegación extremeña tiene su campo de actuación en Senegal y Palestina, dos zonas en las que la problemática no está en la metereología, sino en las duras condiciones que la población sufre por los conflictos armados. Otro objetivo es el de hacer hincapié en la sensibilización social sobre tales situaciones, que se lleva a cabo con iniciativas como ésta.