Se llama Embarcadomo y es un sistema software inteligente capaz de aprender los niveles óptimos de luminosidad que prefieren los usuarios, regulando de forma remota la luz de un despacho del Embarcadero, concretamente en el Punto Empresarial. Viene desarrollándose desde hace cuatro años por la Cátedra Telefónica y el grupo Quercus de la Universidad de Extremadura, y ayer se presentó su aplicación en este edificio de la arqueología minera.

Los datos son enviados por internet a un servidor de la Politécnica, que relaciona toda la información recogida durante meses y es capaz de aprender los niveles adecuados de luminosidad, ahorrando un 15% de energía, según explicó ayer el profesor Adolfo Lozano. El concejal de Innovación, Jorge Carrasco, agregó que la intención es ampliar la medida a otras dependencias municipales, optando a los fondos europeos 2014-2020 que priman estas inversiones.