El pleno de la corporación municipal aprobó ayer definitivamente el presupuesto del ayuntamiento para el 2009. Lo hizo al rechazar las alegaciones presentadas a las cuentas municipales. Las alegaciones se desestimaron con los trece votos del PSOE, IU y FC. Los presupuestos tienen 89,4 millones en gastos y 89,5 en los capítulos de ingresos. Pero estas cantidades se modificarán en un mes, en el momento que el plan de saneamiento se debata ante el pleno de la corporación y los 8,5 millones que ahora aparecen en los ingresos y gastos con cargo al canon del agua se incorporen a las cuentas locales por la vía del plan de saneamiento.

El ejercicio presupuestario del 2009 es muy distinto a otros. No solo se aprobará un presupuesto, sino que vinculado al mismo se sacará un plan de saneamiento para afrontar una parte destacada de la deuda del consistorio. El plan es por 30,1 millones, que es el máximo que puede el ayuntamiento con cargo al real decreto 5/2009, que permite a las corporaciones municipales un mayor endeudamiento y poder atender con operaciones de crédito bancario los gastos corrientes (hasta ahora solo se autorizaba su destino a financiar inversiones).

Los 30,1 millones saldrán de las entidades bancarias (en principio de 6 créditos). Su amortización y el pago de intereses procederá del plan de saneamiento, cuya principal fuente de financiación será el canon del agua. La conclusión es que la empresa que a partir del año 2010 gestione el servicio municipal del agua será la que pague una parte importante de la deuda municipal. El real decreto da un plazo de 6 años para cancelar las operaciones de crédito, por lo que el pago del canon se podría periodificar durante un sexenio.

El canon lo paga la empresa, bien con cargo a los beneficios o por el valor de reposición de las instalaciones del servicio que le presta el consistorio (otra cuestión es cómo repercutirá la empresa este coste entre los usuarios del servicio y los mecanismos de control del ayuntamiento para evitar subidas excesivas).

El canon es una fuente de financiación extraordinaria con la que se encuentra el ayuntamiento, ya que ahora coincide que tiene que renovarse la gestión indirecta, con cargo a una empresa, del ciclo integral del agua (abastecimiento y depuración). Canal de Isabel acaba su actual contrato el próximo mes de febrero.

El canon del agua se ha convertido en motivo de controversia política durante el debate de los presupuestos, una discusión que de momento decae o, al menos, se aplazará. Aunque el presupuesto de ayer se aprobase con los 8,5 millones de euros del canon, esa cantidad se acabará retirando, lo que realmente afectará a gastos por 3,5 millones, que no se ejecutarían. Los otros 5 millones que el presupuesto financia con el canon son de deuda pendiente de aplicación, débito que entrará en el plan de saneamiento, por lo que se acabaría financiando con el canon, pero por vía del mencionado plan.

El real decreto permitirá al ayuntamiento que dentro de este ejercicio obtenga los 30,1 millones con cargo a las operaciones de crédito y por tanto empezar a pagar deuda tras el verano. También posibilita que los créditos se amorticen en 6 años, con el cargo de los intereses, y que se paguen con el canon del agua.

DEBATE EN EL PLENO El gobierno incorporó ayer la aprobación de los presupuestos con la desestimación de las alegaciones por vía de urgencia. El portavoz del gobierno y edil de Economía, Lorenzo de la Calle, justificó la urgencia en la necesidad de empezar a dar pasos para que el plan de saneamiento se pueda aprobar en pleno antes del 26 de julio, plazo que fija el real decreto. Añadió que las alegaciones (del PP, de sindicatos y de acreedores por sentencias de expropiación, que es un tercio de la deuda pendiente de aplicación) se desestimaron en base a los informes de la intervención municipal.

El debate lo abrió Felipe Vela. El edil de Foro Ciudadano volvió a manifestar sus dudas de que se puedan aprobar ahora los presupuestos con el canon sin que antes se haya decidido si la gestión del agua se volverá a adjudicar a una empresa. No obstante, explicó que daba su voto por la incidencia negativa que el retraso en la aprobación de las cuentas tendría en temas de relevancia.

El edil añadió que también existe "un compromiso político" con la alcaldesa, Carmen Heras, que le lleva a votar "algo que en otras ocasiones no lo haría". El concejal aprovechó para anunciar que con su respaldo de ayer al presupuesto daba por finalizado este compromiso. "A partir de ahora, libertad de voto", dijo.

Vela también adelantó qué condiciones se tendrán que cumplir para que apoye el plan de saneamiento. Aseguró que cuando a finales de julio se debata en el pleno se tendrá que haber ratificado previamente "la gestión indirecta" del servicio, con cargo a una empresa, con un periodo de concesión que no supere los 20 años y un canon suficiente para pagar el plan.

Elena Nevado, portavoz del PP, grupo que votó en contra de la desestimación de las alegaciones, entre las que estaba la del PP, aseguró que la transparencia en el debate de las alegaciones "brilla por su ausencia" porque se dictaminaron en la comisión local de Economía del martes sin que antes se hubiese aportado la documentación a los grupos.

Nevado pidió a Heras que el gobierno explique qué modelo de gestión se ha elegido para el servicio, indicando que el grupo socialista no se atreve a adelantar que la gestión será indirecta, por una empresa, porque su socio de gobierno, el edil de IU, Santiago Pavón, se ha pronunciado en contra de la misma.

La portavoz volvió a reiterar que "no es creíble" que se saque el presupuesto con un canon sin antes haber adoptado una decisión sobre el modelo de concesión a aplicar.

Santiago Pavón no habló ayer del canon del agua, pero respaldó que se recurra al real decreto porque "resuelve problemas" de deuda de los consistorios y es "un tren que no vuelve a pasar".

IU ha apoyado que la gestión vaya a una empresa mixta (con participación del ayuntamiento). Sin embargo, la intervención municipal ha puesto en duda esta fórmula para la obtención de recursos necesarios para afrontar el plan.

De la Calle tampoco entró a detallar el modelo de gestión, pero sí defendió que el escenario que abre el real decreto es una posibilidad única para afrontar gran parte de la deuda, incidiendo en que el canon "es la salvación". De la Calle criticó que el PP hable de presupuestos ficticios cuando, según indicó, gran parte del débito que ahora se quiere afrontar es de los incumplimientos de presupuestos aprobados por corporaciones con gobiernos del PP.