La empresa cacereña Limpiezas Sánchez (Limsa) ha presentado alegaciones al concurso convocado por el ayuntamiento para adjudicar los servicios de mantenimiento, limpieza y vigilancia de centros escolares y dependencias municipales. Uno de sus argumentos es que las concentraciones de servicios y, especialmente, una de las condiciones recogidas en el pliego facilitan que para los grandes grupos empresariales sea más asequible hacerse con este contrato, que es anual y con un precio tipo de 1.319.950,5 euros.

El ayuntamiento ha impulsado en esta legislatura la política de recurrir al sector privado para gestionar servicios de titularidad municipal, los dos últimos ejemplos han sido los parques y la recaudación ejecutiva, con el objetivo de reducir costes y mejorar la prestación del servicio.

De momento, el contrato de mayor importe de este año es el de conservación, limpieza y vigilancia de colegios y dependencias municipales, que une en un único contrato servicios que hasta ahora se prestaban individualmente, como la limpieza de los colegios, servicio adjudicado a Limsa, un contrato ya finalizado y que está en fase de prórroga.

Limsa argumenta en sus alegaciones que se ha vinculado en un único contrato funciones heterogéneas y de difícil prestación por una sola empresa, además en una de las cláusulas del pliego se apunta que, a efectos de la solvencia económica, técnica y personal, se podrá tener en cuenta en la oferta que presente una empresa los medios o recursos de otras sociedades que pertenezcan a su mismo grupo empresarial siempre que acredite que los tiene a disposición.

Esta cláusula, según las alegaciones de Limsa, da una ventaja a los grandes grupos de empresas o sociedades y perjudica a la mayoría del tejido empresarial cacereño, aunque se una en utes, porque se está tomando en consideración el tamaño de la empresa y sus vinculaciones como parte de un grupo de sociedades. Limsa también advierte de que esta política favorece la concentración de contratos de servicios de titularidad municipal en pocas manos, con el peligro de que se formen centros de poder económicos que pueden mediatizar el funcionamiento del consistorio.

Este concurso antecede al de recogida de residuos (vinculado al sector limpieza), que es de mayor volumen económico y que sale en el 2005.