La Federación Empresarial Cacereña (FEC) mostró ayer con crudeza su disconformidad con las últimas declaraciones del actual presidente de la Cámara Oficial de Comercio e Industria de Cáceres y representante de la Federación Empresarial Placentina, José Jarones, en las que manifestaba la necesidad que tiene la entidad cameral de disponer de una nueva sede que sea "más funcional, con unos accesos más rápidos y adaptada a los servicios que se prestan".

Esta federación empresarial destaca que "sería aconsejable un cambio, pero no vale la excusa de mejorar unos servicios que, prácticamente, sólo se dan en el norte de la provincia".

La FEC considera estas declaraciones cargadas de un alto contenido electoralista, dada la cercanía de los próximos comicios, ya que "en ningún caso la actual dirección continuó las negociaciones que el anterior comité, dirigido por la FEC, mantenía con el Ayuntamiento de Cáceres en las que se gestionaban mejores instalaciones".

Además, insiste en que cuando tuvo la oportunidad, a través del proyecto Incyde, del Consejo de Cámaras y de la UE, de crear y poner en marcha un vivero de empresas decidieron implantarlo en Plasencia. Y se pregunta: ¿Por qué no se utilizaron esos fondos para la tan necesaria sede en la ciudad de Cáceres, y además se hipoteca a la Cámara casi de por vida para construir un edificio en Plasencia?".

Por otro lado, continúa el comunicado, dado el "carácter aperturista" de la actual directiva de la Cámara, parece, a tenor de las localidades en las que se han celebrado los plenos de la entidad en los últimos cuatro años, que la "apertura se dirige únicamente a Plasencia" ya que de los 23 plenos que se han celebrado, 16 han sido en Plasencia, 4 en Cáceres, 2 en Navalmoral de la Mata y 1 en Coria.

Por todo esto, la FEC pide que no intenten confundir a los empresarios cacereños convenciéndoles que un cambio de sede va a mejorar "los servicios que ahora no reciben".