La Federación Empresarial Cacereña (FEC) y la Cámara de Comercio han presentado alegaciones a la ordenanza de venta ambulante. En ambas se alude al articulado sobre medidas para el control y vigilancia de esta actividad, incluso la Cámara propone un texto orientativo con funciones a desarrollar por el consistorio y los agentes de la Policía Local en trabajos de inspección, indicando que se tiene que verificar "de forma sistemática" que los vendedores tienen autorización para ejercer la actividad.

La federación, en la propuesta que realiza de nueva redacción del artículo 31 de la ordenanza, sugiere que los agentes procedan a levantar el puesto y a la intervención de la mercancía, en vez de lo que se recoge en el texto de la norma, en el que se indica que se procederá al levantamiento o según las circunstancias que concurran a la intervención objeto de venta sin permiso.

Las alegaciones se vieron en la reunión de la Comisión de Desarrollo Local, que se celebró ayer. No hubo dictamen en relación a las propuestas que se hacen desde la Cámara y la Federación Empresarial, aunque sí se decidió que las alegaciones se analizarían en una próxima reunión extraordinaria de la comisión.

La Cámara plantea en su alegación que se debe aprovechar la regulación que de la venta ambulante se hace con la ordenanza para realizar un desarrollo de las competencias de inspección y no quedarse solo en qué función tiene asignado cada órgano.

La Cámara propone también una baremación para la adjudicación de puestos, con conceptos, criterios y puntuación. Plantea que se dé más puntos a los criterios de vecindad o domicilio social en el término de Cáceres, a los artesanos que vendan productos manufacturados por ellos y a aquellos solicitantes con discapacidad física superior al 33%.

La federación realiza en sus alegaciones puntualizaciones a artículos de la ordenanza y así sugiere que la autorización municipal sea personal, no pudiéndose arrendar, ceder o transmitir "por título mortis causa".