La diferencia es brutal. Natalia Narros, propietaria de la Chocolatería Valor, que tiene terrazas tanto en Cánovas como en San Pedro de Alcántara --vías de zona 4 y zona 1 respectivamente--, se muestra en contra de la zonificación actual de la normativa, por lo que cambiaría la ordenanza en función de los beneficios. "Pago más de 700 euros en Cánovas por cuatro mesas y más de 900 en San Pedro de Alcántara por tener 16. Y con muchas más sillas, porque en la avenida de España solo dejan dos y en San Pedro de Alcántara se pueden poner hasta cuatro", explicó ayer.

Actualmente, la fórmula para calcular la tasa incluye una serie de variables y fijos. Hay que multiplicar cuatro valores: El precio del metro cuadrado (depende de la zona: 1, 2, 3 o 4); el parámetro de aprovechamiento del suelo (en este caso para negocios de hostelería es del 0,0017); el número de metros de suelo que se quiere utilizar (calculando 1 metro por cada mesa y silla); y el número de días (el promedio de colocación de terrazas es de 180 días). Además, a todo ello hay que sumarle una cuota fija, el parámetro de utilidad de cada licencia, que en este caso resultaría de la multiplicación de 8 (unidades) por 12 euros, que con el IPC que se quedarían en 12,5 euros.