El pleno de la corporación aprobó ayer una nueva moción sobre la segunda fase del hospital universitario, que aún no se ha iniciado. Son acuerdos que en la práctica no sirven para nada porque la competente es la Junta de Extremadura, solo valen para abrir un debate sobre un proyecto de una obra que se eterniza y para que unos y otros se responsabilicen del retraso. La moción que se aprobó ayer, por unanimidad, la presentó el PP y en la misma la corporación insta a la Junta a que se financie esta segunda fase con los fondos europeos para la recuperación o con parte de los fondos europeos del programa operativo vigente que están aún sin ejecutar y que el portavoz del PP, Rafael Mateos, cifró en 700 millones en su intervención ante el pleno.

En sus turnos, Francisco Alcántara primero y el ponente Mateos después recriminaron a la Junta que en el proyecto de los presupuestos autonómicos para 2021 solo haya un millón de euros para la segunda fase del hospital. «Un millón de euros para el hospital de Cáceres y seis para el de Don Benito-Villanueva en un nuevo ejemplo de un trato discriminatorio», afirmó Alcántara. «Al final se hará antes el hospital de Don Benito-Villanueva a costa del de Cáceres y eso habiendo fondos europeos suficientes, otra cosa es la capacidad para su gestión», manifestó el portavoz del PP, que aludió a unas recientes declaraciones del consejero de Sanidad, José María Vergeles, en las que comentó que el proyecto de la segunda fase «no se licitará hasta 2021». En la misma línea se pronunció la portavoz de Cs, Raquel Preciados, al afirmar que «no sabemos nada del proyecto» y pedir «transparencia».

En sus intervenciones, los concejales del PSOE, David Holguín, y de Podemos, Ildefonso Calvo, afearon al ponente que sea ahora el PP el que demande agilidad cuando durante su mandato al frente de la Junta (2011-2015) se frenó la ejecución de la primera fase. Holguín argumentó que el anteproyecto de la segunda fase está redactado y que la obra se financiará con fondos europeos del programa operativo 2021-2026.

La moción que no salió adelantó fue la presentada por Ciudadanos para fomentar el uso del coche eléctrico. Entre los motivos que dieron los concejales no adscritos Francisco Alcántara y Teófilo Amores y el portavoz del gobierno, Andrés Licerán, para no respaldarla es que se presenta solo unos días después de producirse el anuncio de la entrada el exdirigente regional de Cs, Cayetano Polo, en la empresa Infinity Lithium, que quiere extraer de Valdeflores litio, elemento necesario para las baterías de los vehículos eléctricos. El ponente de la moción, el concejal de Ciudadanos Antonio Bohigas, negó que haya una vinculación, «es una incoherencia ligarlo con la mina, no me lo esperaba», afirmó.