Impacientes por conocer el veredicto del jurado, ayer, mientras esperaban, las hermanas y otros familiares del fallecido manifestaron a este diario su "indignación" por el desarrollo del juicio, por el trato dado a su hermano e, incluso, "a toda nuestra familia". En su opinión, "ha parecido que se le juzgaba a él en lugar de al policía que le mató" y salvo su abogado, añadieron, "todos, incluso el fiscal, se han esforzado por atacarle, por hacerle parecer peligroso, y él podía ser drogadicto y haber tenido problemas con la justicia por este hecho, por robar para sus dosis, pero no era peligroso, los antecedentes que tenía eran por hurtos o robos, pero no por hechos más graves o violentos".

Sin atreverse a afirmar que el policía le mató de forma intencionada, lo que sí tienen muy claro es que "no le disparó para defenderse, pues mi hermano no pudo atacarle con una navaja porque él jamás llevaba armas, ni navajas ni de ninguna otra clase".