La ermita de San Jorge se derrumba a la espera de las actuaciones de Patrimonio. A pesar de las continuas denuncias sobre su avanzado estado de deterioro y las peticiones a la administración para que se intervenga de manera inmediata, esta misma semana el templo ha sufrido el derribo parcial de uno de sus muros frontales. Preguntada al respecto por este rotativo, la Junta de Extremadura admitió ayer haber recibido una notificación sobre el derrumbe y avanzó que técnicos de Patrimonio visitarán el templo «de forma inminente» y se tomarán las medidas de urgencia.

En cualquier caso, la dirección general insiste en la «dificultad para intervenir en un bien que no es público». Cabe recordar en ese sentido que este mismo verano la Junta de Extremadura anunció su intención de negociar con los dueños de la finca en la que se encuentra la ermita --se ubica en una propiedad privada-- su cesión como bien público para rehabilitarla. Desde entonces no ha habido ningún avance salvo que sigue en trámite el acuerdo para que finalmente pase a tener titularidad pública.

La ermita se encuentra a unos doce kilómetros de Cáceres a unos metros de la Torre de los Mogollones, para la que también reclaman medidas de conservación. Aunque no hay consenso, los expertos insisten en que data del siglo XIV. Es de reducidas dimensiones y luce frescos sobre pasajes bíblicos con valor pictórico que datan del XVI y están firmados por el pintor Juan de Ribera.

Tampoco existe consenso sobre las décadas de abandono que acumula la ermita. Si bien es cierto, tanto expertos locales en Patrimonio como colectivos como Natura 2000 llevan años alertando de «su grave deterioro» que «hace temer su hundimiento» y reclamando que se actúe para conservar la estructura y las pinturas, que, al estar a la intemperie, también se «encuentran en avanzado proceso de pérdida». Amigos del Museo de Cáceres pidió que se declarara Bien de Interés Cultural y en 2016 volvió a saltar la alarma sobre su estado porque se vio afectada por un incendio cercano aunque las llamas no llegaron al recinto. El humo del fuego si afectó a los murales del interior, según denunciaron los especialistas. Tal es su estado que en 2008 fue incluida la lista roja del patrimonio de la asociación Hispania Nostra que califica el de la ermita como «un caso escandaloso de abandono de patrimonio histórico».

PATRIMONIO «SINGULAR» // En cuanto a su valor patrimonial, los especialistas coinciden en «su singularidad», no solo por las pinturas murales sino por su particular estructura, asentada sobre cuatro grandes arcos y construida aprovechando una hondonada cubierta de agua. En ese sentido, Serafín Martín, profesor y experto en ermitas, insiste en el valor de la de San Jorge, lamenta la falta de actuación de las autoridades públicas e incide en la necesidad de conservar los templos para «conservar parte de nuestra historia». «Nos hemos centrado mucho en la parte antigua y los alrededores, uno tras otro, se han ido cayendo por el desinterés», concluye.