M ás de 200 días llevamos en España con un Gobierno en funciones, la inercia hace caminar a España y al Estado español, con lo que el camino que se recorre por muy positivo que sea, tendrá efectos poco duraderos, así el bloqueo político puede empezar pronto a pasar factura. Una posible prórroga de los presupuestos del Estado incidirá negativamente en la vida de los españoles que dependen directamente de las políticas de empleo público, inversiones, subvenciones y financiación. Rajoy ha dicho recientemente que “La situación está razonablemente bien, y estamos en condiciones de crear 500.000 puestos de trabajos al término del año”, al tiempo de haberse sentido preocupado, porque la incertidumbre creada por el señor Sánchez puede afectar a la economía de los españoles. Desde el Partido Popular, se asegura que con Mariano Rajoy a la cabeza, está en condiciones de formar Gobierno de manera inmediata, con lo que podrían aparecer nuevas reformas que están a la espera de ser aprobadas por un Gobierno que deje de estar en funciones.

España sufre un bloqueo que se puede sintetizar en las tres negativas pronunciadas por el señor Sánchez al decir no a un Gobierno de coalición, como tantos que existen en las principales democracias de Europa: al decir No a un acuerdo de Gobierno que permita la estabilidad política para mantener la creación de empleo, y no, a una abstención responsable para que se ponga en marcha de una vez la legislatura.

Gillermo Fernández Vara, del Partido Socialista y secretario de dicho partido en Extremadura ha dicho: «No es posible el No a todo. Repetir las elecciones no sería bueno ni para España ni para el partido socialista». ¡Miren ustedes por dónde, los no socialistas podemos estar de acuerdo con Fernández Vara, aunque sólo sea por esta vez!

El resultado de todo ello, es que los españoles pagamos ya un bloqueo irresponsable y pagamos una factura de casi trescientos días sin gobierno, que resulta altamente costosa y de efectos perniciosos para el desarrollo de España al no existir alternativa a un Gobierno del PP y ni tampoco Sánchez ofrece, ni puede ofrecer, ninguna opción de Gobierno viable o realista, es un bloqueo sin salida, porque cualquier alternativa que pretenda sostenerse en un partido con sólo 85 votos es inviable.

Dice Pedro Sánchez que votan no, porque son antagónicos e incompatibles con el Partido Popular, nada más falso e incierto puede sostenerse con más parsimonia. O quizás sea caradura o desconocimiento, todo imposible en una persona que detenta la secretaria general del PSOE. Los partidos políticos constitucionalistas, en estos reinos y en cualquiera de los reinos y repúblicas de la Unión Europea, son complementarios y compatibles y por eso tenemos más de una docena de gobiernos constituidos por populares y socialistas en todo el continente.

Los partidos constitucionalistas son incompatibles y antagónicos con aquellas fuerzas políticas, consentidas en libertad y en democracia, que pretenden destruir el sistema y someter a los libres ciudadanos al imperio de su ideología, dictaduras más o menos duras, pero dictaduras en todo caso «(Antagónicos e incompatibles)», Antonio Serradilla Alcázar, especializado en Análisis de Política Nacional.