Somos conscientes de las repercusiones que puede tener esta huelga tanto para nosotros como para el servicio de Urgencias y los pacientes, pero permitir continuar en la situación actual es inadmisible al ser atendida gran parte de la población por médicos en formación que toman decisiones sobre su salud, en ocasiones con un nivel de responsabilidad y presión que no les corresponde». Con estas palabras terminaron ayer los Médicos Interno Residentes (MIR) la carta que leyeron a la ciudadanía en la concentración que llevaron a cabo en el San Pedro de Alcántara para explicarles las razones que les han llevado a iniciar desde ayer la huelga indefinida.

Los MIR han llegado a esta situación tras mantener cuatro reuniones con el Servicio Extremeño de Salud y no lograr un acuerdo que solucione sus reivindicaciones. Exigen que se contrate a más médicos adjuntos para garantizar la supervisión porque, en estos momentos, la carga asistencial que soportan los facultativos dificulta esta labor. «Los pacientes os merecéis una sanidad de calidad. En esta huelga luchamos por todos nosotros: Mejor docencia, mejor asistencia», aseguran.

El paro comenzó ayer por la tarde y solo va a afectar a las guardias que realizan en los servicios de Urgencias; es decir, las que cubren de lunes a viernes de 15.30 a 08.00 horas y las 24 horas los fines de semana y festivos. En el complejo hospitalario de Cáceres se forman 130 MIR y ayer por la tarde la huelga fue secundada por la mayoría. Según los datos facilitados por el Servicio Extremeño de Salud (SES) solo uno de los siete residentes atendió ayer la guardia que le correspondía en Urgencias. En cambio, tal y como afirmó por la mañana el consejero de Sanidad, José María Vergeles, las movilizaciones no van a afectar «en absoluto» a la asistencia. La atención, dijo, «está garantizada por los excelentes profesionales que trabajan en las urgencias y emergencias del Hospital Universitario de Cáceres y del San Pedro de Alcántara». La sala de espera de este último centro estaba por la tarde llena, como siempre.

REFUERZOS / Para paliar los efectos de la huelga el SES informó a este diario de que se reforzaron las Urgencias en el San Pedro de Alcántara con un adjunto más, mientras que en el nuevo hospital el servicio se cubrió con la plantilla habitual. Los MIR recuerdan que esto vulnera el derecho a la huelga y se plantean denunciar la situación. «Lo vamos a estudiar y, en función de cómo se vayan desarrollando los acontecimientos nos plantearemos denunciar», dijo ayer uno de los residentes, Fernando Cáceres.

El SES no detalló a este diario cómo se organizó la asistencia en las Urgencias pediátricas, que en las guardias están atendidas por un médico residente (al que por turno le tocaba ayer secundó la huelga y no cubrió la consulta). «Pediatría está tan asegurada como lo estaba antes con un especialista», afirmaron desde el Servicio Extremeño de Salud.

Precisamente una de las principales reclamaciones de los MIR es que se dote a las Urgencias pediátricas de un médico adjunto permanente, ya que hasta ahora estos médicos en formación pasan solos estas consultas. Los encargados de resolverles las dudas son los adjuntos de las Urgencias generales pero, debido a la saturación del servicio, muchas veces resulta complicado solucionar los problemas que surgen.

Para solventar esto el SES propuso a los MIR reorganizar el servicio para incorporar a partir del 1 de diciembre un adjunto más en horario de tarde que supervise a los residentes de primer año que se encargan de las Urgencias pediátricas (esta tarea se le encargará a uno de los médicos de guardia en el turno de noche). Y a partir del 1 de enero un médico más los fines de semana que hará turnos de 10-12 horas.

Para los residentes no es suficiente porque la supervisión no se garantiza en todos los turnos. Ellos pedían tres nuevos adjuntos. «Las noches y los fines de semana, cuando menos trabajadores hay, queda al descubierto. Nos planteaban soluciones un poco a medias», indicó ayer otra de las MIR, María Bautista. Han rechazado además la propuesta porque, al no conllevar contrataciones, estiman que la nueva distribución va a sobrecargar a los médicos (los facultativos ya denunciaron esta excesiva carga asistencial en verano).

NO HAY REUNIONES PREVISTAS / Por el momento no se les ha emplazado a un nuevo encuentro, aunque los residentes aseguran que están abiertos a nuevas negociaciones. «Es una huelga indefinida pero queremos que sea lo más breve posible. No es de agrado estar aquí, los pacientes no se lo merecen y los adjuntos tampoco. Estamos abiertos a nuevas negociaciones». Por su parte, el consejero José María Vergeles les pidió que reconsideraran su decisión. Y calificó de «desplante» la reunión del pasado martes, que duró diez minutos escasos debido a que los MIR se sintieron atacados porque se les acusó de faltar a la honorabilidad de los facultativos de Urgencias.

De sus reivindicaciones lo único que han logrado ha sido que se comience a gestar un protocolo de supervisión, obligatorio desde 2008, en el que se aclaren los niveles de responsabilidad y de supervisión, además de las competencias según el año de residencia. Por tanto, mientras no consigan mejorar la formación, la huelga se mantendrá en el tiempo.