Mantener Eroski abierto es insostenible». Fue la idea que trasladó ayer la cadena vasca a los sindicatos en la primera reunión que se ha celebrado para negociar las condiciones de los despidos. Alegan que acumulan 41 meses de pérdidas económicas para justificar el cese de actividad. La afirmación viene a confirmar los rumores que durante años ha habido en la ciudad en torno a la pérdida de clientes en el hipermercado.

La firma ha aguantado casi cuatro años pero la situación era cada vez más complicada. Por eso, tal y como avanzó este diario cuando se conoció la noticia del cierre, aprovechó el cambio de titularidad del centro comercial Ruta de la Plata (lo ha adquirido la empresa ASG) para desistir del contrato y cerrar definitivamente. La nueva gestora le ofreció la oportunidad de continuar, pero Eroski ha decido marcharse.

Al encuentro, que tuvo lugar en el hotel NH Palacio de Oquendo, acudieron dos representantes de la firma, entre ellos el abogado, y los sindicatos Fetico (mayoritario) y CCOO en representación de los trabajadores asalariados.

La reunión fue una primera toma de contacto para fijar las bases de la negociación. Duró poco más de media hora y sirvió para que Eroski entregara toda la documentación que acredita el cierre, donde se encuentran, entre otros datos, las cuentas del grupo desde el año 2015. Ahora los sindicatos tendrán que analizarla para ofrecer una primera propuesta en la siguiente reunión, que se ha fijado para el 22 de octubre.

SE LIMITA A LA LEY / Por el momento la empresa, al justificar el cese de actividad por causas económicas, se limita a la ley y ofrece una indemnización de 20 días por año trabajado, con un máximo de 24 mensualidades. Sin embargo los sindicatos están convencidos de que Eroski está abierto a una negociación, ya que en otras comunidades donde la firma vasca ha cerrado tiendas siempre ha tenido predisposición a negociar y a mejorar esas condiciones.

«Nosotros ahora vamos a analizar esa documentación e intentaremos mejorar las condiciones e incluso pedir la reubicación de los trabajadores porque ya está siendo bastante dramático y traumático para ellos todo esto», señaló ayer la secretaria general de CCOO, Valentina Tarriño.

Como ya avanzara este diario, después de anunciar el cierre a los empleados, Eroski se trasladó hasta la capital cacereña para ofrecer a los trabajadores las vacantes que tiene el grupo en toda España. La mayor parte de esos puestos se encuentran en País Vasco y en Baleares por lo que, en principio, ninguno ha dado el paso de aceptarlos. Algunos sí se han interesado pero no han tomado aún la decisión ya que, de aceptarlo, supondría marcharse de la ciudad. La mayoría de los trabajadores tiene una media de entre 40 y 50 años y lleva prestando sus servicios a Eroski en Cáceres desde que abriera, hace ya 25 años.

Estas reuniones servirán para decidir la indemnización que recibirán los trabajadores asalariados del hipermercado, unos 25, ya que el resto son cooperativistas. Estos últimos concretarán también esta semana la cantidad a percibir en una reunión con el consejo rector.

Ayer la cadena vasca tampoco aclaró a los sindicatos la fecha concreta en la que tiene pensado cerrar definitivamente. La liquidación de productos durará hasta el 24 de noviembre, aunque la previsión es que antes de esa fecha se haya vendido todo. Y es que en las últimas dos semanas el hipermercado se ha llenado de clientes que acuden atraídos por los descuentos. Los empleados se sienten frustrados, ya que uno de los motivos del cierre ha sido precisamente el descenso acusado de clientes, que acumulaba ya varios años.