La alarma se disparó en torno a las seis de la tarde de ayer cuando se detectó un escape de gas incendiado en el Residencial Beatriz, un céntrico bloque de viviendas situado en el número 18 de la avenida Rodríguez de Ledesma. Aunque no hubo que lamentar daños personales, la inquietud y sensibilidad por los recientes sucesos de Castellón alertó a los vecinos y a las fuerzas de seguridad de la ciudad, que se desplazaron hasta el lugar de los hechos y controlaron con rapidez la situación.

El suceso, según explicaron operarios del Servicio Provincial de Prevención y Extinción de Incendios de Cáceres (Sepei), se produjo como consecuencia de la rotura de la tubería general de la fachada del inmueble, justo entre dos viviendas del primer piso del edificio. Al tratarse de un escape incendiado, se originó una llama o lengua de fuego que afectó a dos terrazas de esas viviendas de la primera planta, pero que no se propagó por el interior de las mismas, según comentaron los bomberos.

El que la rotura se detectara en el exterior fue positivo, indicaron las mismas fuentes consultadas, ya que de haber sido en el interior podría haberse originado una explosión y haber tenido fatales consecuencias.

Los primeros en llegar hasta el lugar de los hechos fueron los agentes de la policía local, cuerpo que desplazó al menos tres patrullas y que iniciaron las tareas de extinción de las llamas con extintores. Los agentes también organizaron la evacuación de vecinos, aunque sólo se desalojaron los de viviendas colindantes (las que están al lado y arriba de las terrazas afectadas).

También se desplazaron dos patrullas del Cuerpo Nacional de Policía, que colaboraron con el resto de fuerzas desplegadas. De los bomberos acudieron dos dotaciones (una escala y un primera), que sumaban siete operarios --entre ellos el jefe de salida-- y el jefe que estaba de guardia.

Nada más detectarse el problema, se procedió al corte de la llave del gas y se dio aviso a la compañía distribuidora. Los bomberos aclararon, sin embargo, que como en Cáceres no se podía solucionar el problema se tuvo que dar aviso a Jaraíz de la Vera para que se desplazaran los operarios, arreglaran la avería y repusieran el suministro. Tanto los bomberos como la policía insistieron en que el incidente no tuvo consecuencias graves y que "la situación quedó controlada en muy poco tiempo".

UN SUSTO Vecinos consultados por este diario admitieron su preocupación por lo ocurrido, especialmente al principio por la confusión originada y el olor a gas que había en los alrededores del edificio, situado en la barriada del R-66.

Por otro lado, según informó la policía local en su parte de incidencias, sobre las 10.35 horas del pasado lunes se tuvo conocimiento de que en la calle General Yagüe se encontraba ardiendo un contenedor de basura. Una dotación policial se trasladó hasta el lugar de los hechos y comprobó que se trataba de una bolsa de plástico que estaba ardiendo. Los agentes la apagaron inmediatamente y la sacaron del contenedor afectado.