La alarma vecinal saltó en torno a las tres de la tarde de ayer cuando un espectacular incendio, por causas que aún se desconocen, se desencadenó en el número 17 de la calle Brunete, en una casa de planta baja de la barriada cacereña de Aguas Vivas. La expectación se generó en la zona al pensarse, en principio, que había alguien en el interior de la vivienda. Sin embargo en ese momento no se encontraba nadie en el inmueble y no hubo que lamentar daños personales, aunque los materiales fueron de bastante consideración.

El jefe de guardia del parque de bomberos de Cáceres, Juan Pastor, explicó ayer que las llamas afectaron principalmente al salón del domicilio y que en el resto había mucho humo. A la llegada de los agentes, "el fuego estaba bastante desarrollado y había bastante temperatura", dijo Pastor. Lo primero que se hizo fue sofocar las llamas y realizar un rastreo para comprobar que dentro de la casa no se encontraba nadie. Posteriormente se abrieron puertas y ventanas para ventilar las dependencias.

EVACUACION Los bomberos, dada la magnitud del incendio, evacuaron a los vecinos de la casa contigua e instalaron una escala en el patio trasero para evitar que el fuego se propagara. El ataque a las llamas se realizó por la parte delantera y en 10 minutos estaba todo controlado.

Hasta Aguas Vivas se desplazó una dotación de nueve bomberos, incluido el jefe de guardia. Los agentes acudieron con una autobomba urbana ligera, una autoescala y una autobomba pesada nodriza, desplazada por si se hacía necesario utilizar más agua, aunque no fue preciso.

Los bomberos rescataron a un perro que había en el patio. También se sacaron dos motos del interior, que no ardieron. El Cuerpo Nacional de Policía de Cáceres investiga el caso.