Está en las traseras del polígono industrial de las Capellanías. Se proyectó para tratar un caudal medio diario inicial de 1.236.000 litros al día y con una proyección de futuro de 1.854.000. Cuando en el año 1999 se planificó esta depuradora se pensó en que en un principio se tratarían aguas residuales de 2.744 habitantes y que en un futuro llegaría a dar servicio a 4.116. Se construyó para tratar los vertidos del polígono industrial, de parte de la urbanización de los Castellanos, del R-66-A y de los dos sectores de la Sierrilla. Los vertidos de aguas residuales que se tratan en esta estación se vierten en el arroyo del Junquillo. En la zona más cercana a esta instalación no se ha producido un desarrollo de nuevas barriadas. Según el censo de población a 1 de enero de 2013, la población del sector A del R-66 es de 1.050 habitantes, en los dos sectores que tiene la Sierrilla son 800, mientras que el total de habitantes de los Castellanos es de 2.279.