"Ningún yacimiento arqueológico dice nunca su última palabra. Maltravieso no la ha dicho y tardará mucho en decirla". Así lo explicó ayer una de las responsables de las excavaciones en la cueva de Maltravieso, Isabel Sauceda, quien señaló que en el yacimiento cacereño, con unos 100 metros, apenas han comenzado "a rascar" la superficie. La arqueóloga explicó que el grueso del trabajo del equipo de investigación de Los Primeros Pobladores se ha centrado hasta ahora básicamente en la limpieza de la cavidad y que aún "queda mucho por excavar".

Sauceda insistió en que la aparición de industria lítica presupone que "alguien lo tuvo que hacer" y apuntó que sería "fantástico" hallar restos humanos de hace 350.000 años, el objetivo más ambicioso de este proyecto como ya reconoció el prestigioso arqueólogo y también responsable de este proyecto Eduald Carbonell.

IMPORTANCIA VITAL La otra cabeza visible del proyecto junto a los expertos anteriormente mencionados, Antoni Canals, coincidió con Sauceda, al situar al yacimiento de Maltravieso como uno de los grandes yacimientos de Europa "gracias a la calidad de sus vestigios arqueológicos", dijo.

Canals añadió que la cueva cacereña empieza "a crecer en el ámbito de la investigación europea" y destacó su importancia "vital para entender la difusión del arte paleolítico".