Por las fuentes documentales, conocemos la existencia de diferentes industrias tradicionales que durante siglos estuvieron presentes en la vida económica de la vieja villa cacereña. Tenerias, lavaderos, batanes, tintes o molinos y hornos de pan o de cal formaron parte del entramado económico local durante siglos. Y esa es precisamente la temática del Documento del Mes en el Palacio de la Isla.

"Aunque sabemos de la existencia de 25 molinos situados, principalmente, en la Ribera del Marco, desconocemos el uso de cada uno de ellos y especialmente la exacta ubicación de aquellos que estaban emplazados en otros lugares de la ciudad. Por ello es importante consultar los documentos que nos indican quiénes eran los propietarios y dónde estaban situados", indica el ayuntamiento en una nota de prensa.

Concretamente. el Documento del Mes de Agosto informa que entre los propietarios de los 10 molinos de aceite existentes en Cáceres en el año 1870, "encontramos a miembros de la nobleza local como la familia Ovando con tres molinos en propiedad o la familia Ulloa con otro molino". También aparecen grandes propietarios locales como Antonio Paredes o Juan Bruno Fernández o instituciones religiosas como el convento de Santo Domingo o la Obra Pía de Vicente Marrón, gestionada por la Iglesia.

Hay almazaras no solo en la Ribera, también existieron en Camino Llano, en Peña Redonda o en el propio recinto intramuros, concretamente en la calle de la Amargura. "Como podemos observar los molinos de aceite, tan necesarios en la economía rural, estuvieron repartidos por diferentes zonas de la población. Actualmente solo quedan restos de algunos de ellos y solamente el de la Fuente del Rey, hoy Espacio Joven, conserva parte de su estructura industrial", concluye el consistorio.