Por primera vez, una mujer presidía en 2019 la Casa de Andalucía de Cáceres y se trataba, también como novedad, de alguien que no había nacido en la comunidad andaluza. Esperanza Criado Muriel era cacereña de la calle Caleros, casada con Emilio Ojeda, un sevillano del Betis. Falleció ayer y su muerte ha causado una gran conmoción en la ciudad.