A las seis de la tarde de ayer la policía local tuvo que intervenir en el Hospital San Pedro de Alcántara porque en el quirófano de partos del Materno había una gran pelea. Al parecer, según cita textualmente el parte policial, un grupo numeroso de personas estaban siendo controladas por los vigilantes del hospital al encontrarse dando grandes voces por el fallecimiento de una niña durante un parto mediante cesárea.

Los familiares, continúa el parte policial, aseguraban que el desenlace se debía a una "negligencia" porque no le había practicado a la madre la intervención a tiempo a pesar de estar solicitándola durante dos días. Por esta razón, habían intentado agredir al ginecólogo que la había atendido. Finalmente, el servicio del hospital, tras la petición de la policía local, decidió relevar al ginecólogo, que debía haber estado de guardia hasta las ocho de la mañana de hoy. El facultativo fue trasladado en un vehículo de la Policía Nacional hasta donde tenía estacionado su vehículo, ya fuera del alcance de los familiares.