El radar móvil que el pasado 23 de enero comenzó a actuar en la ciudad para controlar infracciones y excesos de velocidad se ha aparcado temporalmente.

Tras aproximadamente tres semanas de funcionamiento, durante las cuales se impusieron un total de 63 denuncias, todas ellas por exceso de velocidad, la Jefatura de la Policía Local ha decidido suspender el servicio. El motivo, según explicó ayer a este diario el jefe de la Policía Local, César García, el no disponer de la señalización necesaria ni de los oportunos boletines de denuncia.

El responsable de la Policía Local matizó que aunque dichos elementos "no son legalmente exigibles", se ha considerado oportuno disponer de ellos. "Queremos que el ciudadano que cometa exceso de velocidad en el casco urbano esté perfectamente informado de que existe un control por radar, así como disponer de boletines propios para sancionar".

ACTUACION

Los impresos de denuncia de que dispone la Policía Local no incluyen la casilla correspondiente a sanción por radar, y por ello, durante las tres semanas en que ha estado funcionando el radar móvil en la ciudad, los agentes han tenido que utilizar para las sanciones impuestas los boletines de la Guardia Civil de Tráfico.

Este hecho ha motivado que algunos ciudadanos que habían sido multados acudieran a Tráfico a pagar sus multas, viéndose remitidos a abonarlas a la Jefatura de la Policía Local.

"Para evitar estas molestias, además de la posible duplicidad que pudiera originarse en el caso de que en Tráfico, por error, se cobrasen estas multas y después nosotros tramitásemos de nuevo la misma denuncia al no tener constancia de su abono, es por lo que se ha decidido suspender el servicio de radar hasta no disponerse en la Policía Local de boletines propios", manifestó García.

Por otra parte, "y pese a no ser legalmente exigible", insistió el responsable de la Policía Local, también se instalarán vallas informativas de que la velocidad en todo el casco urbano está controlada por radar.

Así, en las siete vías de entrada a la ciudad --desde Mérida, Plasencia, Valencia de Alcántara, Trujillo, Medellín, Casar de Cáceres y Monroy-- se colocarán vallas fijas con la lectura: "Atención, velocidad controlada por radar en todo el casco urbano"; y existirá además una valla móvil, con la lectura: "Atención, velocidad controlada por radar en esta vía", que se instalará en la calle en que puntualmente se encuentre el radar.

Tanto las vallas informativas como los boletines, que supondrán un coste de unos 12.000 euros, ya están encargados, por lo que "el radar móvil volverá a funcionar en breve".