La sexta edición de la Feria del Libro de Cáceres cerró ayer sus puertas con los deberes hechos. La organización y los libreros coincidieron al valorar el éxito de público y ventas --algo superiores a ediciones pasadas para gran parte de las librerías--. "Teniendo en cuenta que ha habido un día menos y cuatro librerías más, estamos contentos", comentó el presidente de la Asociación Feria del Libro, Antonio Sánchez Flores.

El gerente de la Institución Ferial de Cáceres (Ifeca), Rafael Robina, se pronunció en el mismo sentido y afirmó que "la experiencia ha sido positiva desde el punto de vista económico y promocional". El gerente de Ifeca se congratuló de la alta participación de público en las actividades que han rodeado a la feria y destacó, "sin desmerecer a las demás", el coloquio sobre El Quijote , la representación de La ínsula barataria , y los talleres de animación a la lectura, "que han conseguido que los niños pequeños participen en la feria".

En cuanto a la importante presencia de autores extremeños, el gerente reconoció que, en este sentido, han recogido el testigo de los libreros que organizaron las primeras ediciones. "El éxito y consolidación de la feria viene en gran parte de los cimientos que se pusieron en esas tres primeras ediciones. Se apostó desde un principio por los autores extremeños y eso va a seguir así".

De cara a la próxima edición, Robina manifestó el interés por potenciar las actividades paralelas, como las conferencias o la animación a la lectura, con mayor protagonismo de los colegios, así como contar con más librerías cacereñas.

Con respecto a los libros más vendidos, María del Mar Gil, de Pléyades, destacó a los autores extremeños que han presentado libros en la feria, los libros de bolsillo y la novela histórica.