El Ministerio de Fomento reparte en tres anualidades la financiación de los trabajos del estudio técnico informativo que tiene que definir donde se ubicará la estación del AVE. Llega hasta el 2010 en tres partidas con cargo a la Dirección General de Ferrocarriles, según aparece en los pliegos del concurso que se convocó el 26 de abril. En ese mismo documento se puntualiza que la consultora a la que se adjudique el concurso dispondrá de un plazo de 18 meses a partir de la firma del contrato para que se entreguen "los ejemplares completos" del estudio informativo. A este plazo se suma otro de seis meses para que la consultora dé las soluciones técnicas a adoptar en base a las alegaciones que se puedan presentar al estudio.

Es decir, con los datos presupuestarios y con los plazos de entrega que aparecen recogidos en los pliegos, a finales del año 2009 se pueden conocer las soluciones técnicas para la ubicación de la estación, que no serían definitivas hasta el 2010, y a partir de entonces es cuando se afrontaría la ejecución de la red del AVE en el tramo urbano de Cáceres, en el trayecto que está antes de entrar en las Capellanías y que llega hasta el cerro Romano, con la futura estación incluida.

En los pliegos se justifica la convocatoria del concurso en base a los acuerdos que el 25 de octubre se adoptaron en una reunión en Madrid entre representantes del ayuntamiento, estuvo presente la alcaldesa de Cáceres, Carmen Heras, la Junta y el Ministerio de Fomento. De ese encuentro salieron tres posibilidades para la futura estación: la actual, por el Junquillo, el enclave donde prevé el plan de urbanismo en vigor y que tiene el inconveniente de que aquí se edifican 1.992 viviendas, y en el cruce de la carretera de Malpartida con la autovía A-66, creando un corredor de infraestructuras, ésta es la posibilidad que plantea el futuro plan de urbanismo y que en un principio parecía que sería la solución de ubicación definitiva.

En el pliego se especifica que en aquella reunión se llegó a la conclusión de que "se hace necesario redactar un estudio informativo tanto de la estación de alta velocidad de Cáceres como del trazado del acceso ferroviario a la ciudad". Entre las especificaciones del trabajo a realizar que se recogen en el pliego aparece que la consultora tendrá que estudiar el "soterramiento y/o elevación del ferrocarril" cuando se analicen las opciones del trazado para el acceso a la estación.

FIRMAS Precisamente, soterrar las vías es por lo que apuesta la plataforma ciudadana que se constituyó en diciembre para que la solución que se elija sea mantener la estación en su ubicación actual. Su portavoz, Joaquín Hergueta, entregó ayer en el registro del ayuntamiento "de 4.500 a 5.000 firmas", comentó, que dan su apoyo a la propuesta de la plataforma. Hergueta explicó ayer por la tarde que se va a entregar una copia de las firmas a la Junta y al Ministerio de Fomento, y recordó que, aunque se haya convocado un concurso para redactar el estudio informativo, "la decisión última va a ser de los políticos".

Hergueta confió en que el ayuntamiento "haga suya" la propuesta de la plataforma ciudadana y añadió que se ha solicitado una entrevista con la dirección general de Ferrocarriles para exponer al ministerio las tesis del colectivo que representa.

La plataforma ciudadana defiende que no se necesitaría soterrar 7 kilómetros de vía en el trazado urbano de Cáceres, sino 3 o 4 kilómetros, y no con túneles a una gran profundidad, sino con falsos túneles o cajas sobre cuya superficie se podrían crear espacios libres para usos urbanos. La plataforma ha argumentado que se puede liberar suelo en la zona de la estación de trenes con cuyos beneficios, teniendo en cuenta las limitaciones que establece la ley del suelo, atender la inversión de los gastos extras que supongan soterrar las vías y dejar el trazado por la ciudad.

El concurso del estudio informativo sale con un presupuesto de licitación de 655.676 euros, divididos en tres años --gráfico--. Aunque el plazo global para la ejecución del estudio es de dos años, las consultoras que concurran lo pueden rebajar. Sin embargo, un plazo de ejecución menor no daría más puntos, dado que esta circunstancia no aparece definida cuando se detallan los criterios para la evaluación de las ofertas técnicas que se presenten. Lo que más puntúa es la memoria y programa de trabajo, valorándose la garantía del cumplimiento del plazo ofertado, ya sea menor o igual a 24 meses.