El Hard Rock Café de Madrid, en la céntrica plaza de Colón, sirvió ayer de plataforma de despegue para el Festival del Oeste, la gran cita musical del verano en el recinto hípico que espera cubrir el hueco dejado por la marcha de Extremúsika a Mérida y cuyas entradas estarán ya esta tarde a la venta a través de internet (ticktackticket.com ).

La presentación en la capital de España de este macrofestival cacereño, organizado por el ayuntamiento y la promotora Krea Música, tuvo el escenario perfecto para lo que será su oferta musical: heavy y punk rock. Ante una veintena de periodistas de medios nacionales y extremeños, desplazados hasta Madrid para la ocasión, algunas revistas especializadas y componentes de varios de los grupos del cartel, la alcaldesa, Carmen Heras, vendió el proyecto como una "alternativa cultural más" de Cáceres 2016 y deseó que marcara un "hito" porque en él se había puesto "mucha ilusión". De hecho, aseguró que nace "con vocación de continuidad".

CABEZA DE CARTEL Como ya se ha venido anunciando, la cita será el 2, 3 y 4 de julio. El cartel, que utiliza una cigüeña con sus alas desplegadas como símbolo, está liderado de momento por el grupo argentino Rata Blanca --su líder y guitarrista Walter Giardino asistió ayer a la presentación--. No obstante se anunció que había negociaciones con al menos dos nombres de referencia "internacional" que no se quiso adelantar hasta no cerrar el contrato. Ismael Abad, uno de los responsables de Krea Música, comentó que habían tenido una oferta de Guns N´Roses, pero que pedían un millón de euros. Extremoduro podría estar en liza, pero no se confirmó nada.

La organización tampoco quiso hablar de dinero. Se limitó a señalar que se está barajando un presupuesto "razonable", pero sin concretar cifras porque "aún no está cerrado" y se está a la espera de confirmar la aportación de los patrocinadores. El número que sí se aportó fue el del público que se espera atraer: entre 20.000 y 25.000 personas. "Queremos ser realistas teniendo en cuenta las dificultades y fobias económicas, pero ojalá vengan 90.000", apuntó Abad.

Este explicó que se habían decantado por ofrecer un festival "homogéneo", centrado en el hard y punk rock. "Queremos demostrar que el rock no es marginal y que está más vivo que nunca". El mítico ex de Barón Rojo, Sherpa (José Luis Campuzano), que participará en este primer Festival del Oeste, aseguró que el rock duro "es muy duro" y que dentro de la escala de músicos son los que se comen los "platos más amargos", pero aseguró que a los rockeros también "nos gustan los dulces y los caramelos" y precisamente definió este festival como "un caramelo". "Me encanta --añadió-- participar en un festival en la tierra de los conquistadores y esos días vamos a conquistar algo".

De momento lo que se espera conquistar es público y con ese objetivo, el festival volverá a presentarse con una fiesta en Cáceres el viernes y próximamente en Badajoz y Lisboa.