El Ayuntamiento de Cáceres ha elegido una única finca municipal de referencia situada en el cerro Arropé, muy cerca del Cefot y a medio camino entre Cáceres y Valdesalor, para la construcción del centro budista.

El espacio cuenta con 101 hectáreas de terreno donde se instalará la gran estatua de Buda de unos 60 metros de altura, las embajadas de las principales ciudades budistas orientales, un centro de meditación y el monasterio con las celdas de meditación para los monjes.

El concejal de Urbanismo, José Ramón Bello, ha informado de que algunas de las características que ha hecho que el ayuntamiento apueste por esta propiedad municipal son «las buenas comunicaciones, un entorno medioambiental degradado pero susceptible de ser mejorado con esta propuesta de centro budista y una localización sin un impacto visual en la ciudad».

Asimismo, el consistorio continúa trabajando para que la amistad iniciada entre las ciudades de Cáceres y Lumbini se siga fortaleciendo con la construcción futura del centro budista en el término municipal de Cáceres.

Un lugar, que según ha recordado Bello, «va a ser el punto de unión y reunión de todos los budistas de Europa, y que en este momento está siendo diseñado por un equipo multidisciplinar de técnicos y técnicas tanto nepalíes como españolas».

La finca Arropé, situada pasado el puerto de las Camellas, en la N-630 y que, aunque es de titularidad municipal, su gestión está consorciada con la Junta de Extremadura. Arropé supone la mancha de monte público más grande del ayuntamiento cacereño. Hasta hace unos años, abundaban los eucaliptos, pero la Junta ha cambiado esta especie alóctona por otras autóctonas y ha hecho una reforestación con encinas y alcornoques.

HABLA EL ALCALDE / Tras darse a conocer la noticia, el alcalde de Cáceres, Luis Salaya, ha reaccionado de forma positiva. «Seguimos pensando que es un proyecto que puede ser muy importante para la ciudad, en un momento en el que Cáceres no puede permitirse rechazar nada que vaya a ser beneficioso. Además no le cuesta nada a las administraciones públicas, solo cederíamos el uso del suelo y el proyecto se sufraga 100% con fondos privados. Es muy buena noticia que el proyecto siga adelante pese a la crisis del covid», dijo Salaya. «En el momento en que hemos tenido clara la ubicación sobre la que queremos trabajar, tanto la Fundación como nosotros, lo hemos querido hacer público para que no haya ninguna duda respecto a la transparencia en este proyecto», añadió el dirigente municipal socialista.

El Proyecto Gran Buda prevé una inversión asiática de carácter privado cifrada en 25 millones de euros. Se trata de levantar en la ciudad el centro budista más grande del planeta e incluye la construcción de la estatua de Buda más alta del mundo. La aportación del ayuntamiento se basa en la cesión de uso de la parcela.

Esta iniciativa, auspiciada por la Fundación Lumbini Garden, implica el apoyo económico del gobierno de Birmania y de los monjes budistas. «El clero birmano tiene fondos suficientes para levantar el templo. Pueden patrocinarlo completamente y están valorando hacerlo en su totalidad, por eso la comunidad religiosa quiere ver un proyecto de paz», dijo antes de la pandemia el presidente de dicha fundación, José Manuel Vilanova.

La principal fuente económica del proyecto sería Alice Chiu, empresaria y benefactora mundial y una de las mayores fortunas que hay actualmente en Hong Kong. Además, el maestro budista Rinpoche Shyalpa lidera la iniciativa, y Madame Zhao es la gran impulsora del proyecto desde Hong Kong. El inmueble de Cáceres constaría de una estructura de templo budista, una estupa de paz central, jardines, un monasterio con 20 habitaciones para monjes budistas, comedor y tienda de artesanía.