Una multa de 1.800 euros es la pena que el fiscal solicita para un grafitero que fue sorprendido cuando realizaba una pintada en una céntrica calle de la ciudad. Pide, asimismo, que el acusado, Lorenzo P. R., al que próximamente se juzgará, por un delito de daños, en el Juzgado de lo Penal, indemnice también al ayuntamiento con 567 euros, cantidad en la que se ha presupuestado el coste por la eliminación de las pintadas que éste presuntamente realizó.

Los hechos concretos por los que Lorenzo P. se enfrenta ahora a la justicia tuvieron lugar la noche del 19 de septiembre del pasado año. Eran aproximadamente las 23.30 horas cuando funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía le sorprendieron con un bote de spray de color negro realizando una pintada, exactamente un monigote , sobre una pared de la céntrica calle de General Ezponda.

Posteriormente, los agentes que le sorprendieron comprobaron que, momentos antes, el mismo grafitero había realizado otra pintada, en la que ponía "viva la muerte", en una pared del parque de la plaza de la Concepción, también en el centro histórico de la ciudad.

Estos hechos, hace constar el Ministerio Fiscal en su calificación provisional, son constitutivos de un delito de daños del que es responsable, en concepto de autor, el acusado; y por el que procede imponerle, añade, la pena de multa de 10 meses con cuota diaria de seis euros (unos 1.800 euros), con la responsabilidad personal subsidiaria de un día de privación de libertad por cada dos cuotas no satisfechas. Y en concepto de responsabilidad civil, la indemnización al Ayuntamiento de Cáceres en la cantidad de 567 euros.

Este es uno más de los casos de grafiteros que llega ante la justicia, pues ya en septiembre del año pasado se abrió un procedimiento judicial, en el que el ayuntamiento anunció que se personaría, por las numerosas pintadas aparecidas en las fachadas de la calle Santo Domingo y la plaza de la Concepción. Por aquel entonces, en esta zona actuaban casi todos los fines de semana los grafiteros .