La Fiscalía estudia la situación de un vecino problemático y presuntamente enfermo mental de Los Castellanos que había provocado la alarma en el vecindario tras protagonizar diversos incidentes violentos, entre ellos dos agresiones a residentes de la zona. Tras la entrega la semana pasada a la Fiscalía del TSJEx de las 600 firmas que recogió el colectivo vecinal solicitando la actuación de la administración, la fiscal encargada de las incapacidades baraja la posibilidad de inhabilitarle o designarle un tutor, según explicó ayer a este diario el fiscal jefe, Aurelio Blanco.

Aún no se ha decidido nada al respecto, pero la preocupación es creciente en la barriada, ya que el vecino ha regresado esta semana a su vivienda tras permanecer algo más de una semana internado en un centro hospitalario. "Es una bomba de relojería. Se pasa las noches dando voces y vive sin luz y sin agua", manifiesta una vecina cercana que pide mantenerse en el anonimato por miedo. "Está totalmente descontrolado".

El vecino en cuestión, de 45 años y presuntamente con problemas psiquiátricos y en tratamiento médico, vive solo en un adosado en situación de semiabandono. En los últimos meses, ha agredido a una mujer y a dos menores. Los dos casos fueron denunciados y se está a la espera de que se celebren los juicios.

Además, se le atribuye la rotura de varias lunas de vehículos en Cabezarrubia. El último incidente que se le achaca ocurrió el miércoles por la noche en la avenida Ruta de la Plata. Un individuo destrozó los retrovisores de varios automóviles aparcados en las cercanías del supermercado Lidl, según informó ayer la policía. Aunque no se pudo localizar al causante de los daños, varios testigos señalan a este vecino como el autor de los mismos.