EDAD 29

NACIDO EN GARROVILLAS

TRAYECTORIA LICENCIADO EN HISTORIA DEL ARTE POR LA UNIVERSIDAD DE EXTREMADURA (1996-2000), SE FORMO EN RESTAURACION EN LA ESCUELA DE ARTE Y ANTIG EDADES DE MADRID

Con un taller abierto hace tres meses en la calle San Justo, 50, este experto en restauración de pintura y escultura desvela los detalles de su oficio, en auge en la capital cacereña por el patrimonio pendiente de recuperar de la Iglesia y las cofradías.

--¿En qué basa su proyecto?

--Recuperar el patrimonio de Extremadura con unos trabajos de calidad y a unos precios asequibles. Recibo sobre todo arte sacro y documentación del archivo histórico provincial. Las obras de particulares son las menos.

--¿Qué cualidades debe tener un buen restaurador?

--Paciencia y tener claros los criterios de restauración. Se debe conservar siempre el 100% del original y que todo lo que se haga sea reversible y estable.

--¿Cómo está su mercado?

--Somos pocos pero hay restauradores. Hay mucho intrusismo de personas sin formación que se dedican a la restauración entre comillas. Muchas veces hay que deshacer lo que han hecho y encarece el presupuesto.

--¿El restaurador es artista?

--No debe serlo porque, si lo es, se recrea en la restauración y modifica lo que hay. Hay que tener una capacidad de observación grande y ver los desperfectos y los problemas de la obra.

--¿Qué herramientas utiliza?

--Se utilizan materiales similares a los de la obra que se restaura que sean muy estables. Por ejemplo, la cola de conejo, un adhesivo que se hace a base de cocer pieles y huesos para pinturas o esculturas con trocitos de color a punto de desprenderse. También uso disolventes de distinto tipo, acuarelas y barnices.