Una fuerte tromba de agua y granizo que ha comenzado a las nueve menos cuarto mantiene colapsada la capital cacereña. Arboles caidos, vías cortadas, viviendas inundadas es el resumen de una tormenta que mantiene en alerta a la ciudad y que ha obligado a organizar un dispositivo de seguridad compuesto por 250 efectivos. La policía local, la Guardia Civil, además de los bomberos y policía nacional se emplean a fondo para solventar las múltiples incidencias que ha originado la tempestad. Las zonas más castigadas por el agua son la ronda norte, la avenida de la Hispanidad y los principales accesos al centro.La estación meteorológica de la red Meteoclimatic de Cáceres registró un nivel de precipitaciones próximo a los 50 litros por metro cuadrado entre las 20.30 y 21.30 horas. En el momento de mayor intensidad, se llegaron a recoger casi 25 litros en 15 minutos, según esta estación.
El director de la delegación territorial de la Agencia Estatal de Meteorología, Adolfo Marroquín, explicó que este tipo de tormentas están originadas por la coincidencia de dos fenómenos: por un parte, "la existencia de una borrasca situada al oeste de Portugal con bajas presiones en superficie, junto a una situación de temperaturas muy frías en altura, por encima de los 5.000 metros. Esto provoca que las nubes crezcan muchísimo y descarguen con fuerza". Se trata de nubes aisladas muy condensadas y que contienen mucho hielo --lo que explica el granizo-- "ya que terminan de formarse por encima de los 9.000 metros, donde las temperaturas son de varios grados bajo cero". Marroquín también advierte que este tipo de fenómenos pueden ser habituales a lo largo de toda la jornada de mañana y recordó que la región está en alerta naranja --por riesgo importante-- ante lluvias y tormentas que pueden dejar hasta 30 litros por metro cuadrado a la hora y 80 litros por metro cuadrado cada 12 horas.
Más información en la web de la estación meteorológica de Cáceres de Meteoclimatic.
Los daños
Durante la tromba, avenidas como la de Alemania se convirtieron en callejones sin salida como consecuencia de la caída de árboles y ramas, algunos invadiendo la calzada, y sobre los vehículos aparcados a ambos lados.
En los minutos posteriores a la tromba, los atascos colapsaron puntos como la plaza de Colón, el Puente de San Francisco o la avenida de la Hispanidad, anegados en algunos tramos por el agua, pero también en las nuevas barriadas de la ciudad como Mejostilla, donde en algunos garajes y bajos también quedaron anegados.
En el Puente de San Francisco, los vecinos del número 13 del acceso a Mira al Río no daban crédito a lo que veían sus ojos al abrir la puerta del garaje. Todos los coches flotaban en medio de una gran masa de agua que poco a poco los fue devorando hasta desaparecer. "Nunca había pasado algo así, nunca he visto algo como esto", lamentaba Emilio Arroyo, señalando hacia donde media hora antes estaba su coche aparcado, un BMW. A su lado se lamentaba también Isabel Moreels, ella tiene dos vehículos y ambos estaban dentro del garaje. "Era viejo pero lo he metido hace una hora, acabo de llegar", decía. "Lo importante es que al menos no había nadie dentro del garaje", señaló.
Tras el lamento llegaron las críticas. "Si el callejón y las alcantarillas estuvieran limpias esto no habría pasado", cuestionaba uno de los vecinos. El callejón es el cauce que se creó en al zona para evitar inundaciones y que anoche corría como un río, con el agua que bajaba desde la Ronda de San Francisco.
Precisamente en esa avenida, una de las que bordea la ciudad, los atascos habituales se complicaron junto a la clínica San Francisco, por el agua que bajaba. A la altura de los juzgados, la situación era aún por, con una gran balsa de agua que llegaba a cubrir las ruedas de los vehículos que trataban de pasar. Algunos lo consiguieron y tuvieron que ser ayudados por la grúa para salir.
Minutos de caosEl concejal de Tráfico, Carlos Jurado, ha asegurado que "durante unos minutos la ciudad ha sido un auténtico caos", reconocía a las 23.30 horas, sin tener aún constancia del alcance total de la tormenta en calles y viviendas.
A falta de que se realice una relación completa con todos los daños, ha indicado que el granizo había producido destrozos en árboles, asfalto y casas. También ha afectado al tanatorio, que quedó inundado. La principal preocupación de los servicios municipales estuvo centrada en el tráfico, con fuertes retenciones y cortes en carriles de las principales avenidas, como la de Alemania, por la caída de árboles.
La tromba de agua cogió por sorpresa a todos. "Lo más parecido que he visto en la ciudad ha sido el temporal en marzo de este año, pero este ha sido diferente‡", ha afirmado el concejal, que admitió que en las predicciones meteorológicas de ayer a las 19 horas no se preveía el granizo. "Ha habido dos palmos en la Mejostilla. Eso nunca había pasado. Las precipitaciones han sido muy intensas en muy poco tiempo", subrayó Jurado.
