El director general de Infraestructuras de la Junta, José Luis Andrade, confirmó ayer que ya se está estudiando el interior de las dos grutas que han aparecido en la ronda este con un georradar para conocer su profundidad y tamaño. Los resultados de este estudio será uno de los documentos que se tomarán en cuenta, junto a los informes de Patrimonio y Medio Ambiente, para determinar el grado de protección del hallazgo y su incidencia en las obras de la ronda este.

«Una vez que conozcamos las valoraciones de los técnicos decidiremos qué hacer», comentó Andrade, que ayer por la mañana estuvo en la zona de las obras de la ronda este donde han aparecido las dos grutas. Posteriormente se desplazó hasta el cruce de las avenidas de las Delicias y de Héroes de Baler, donde están en ejecución las obras de la glorieta, «a las que quedan diez días de obra y la instalación de alguna señalización vertical», comentó el director general de la Consejería de Economía e Infraestructuras.

Andrade explicó que de momento no han aparecido nuevas oquedades y que las decisiones técnicas a tomar sobre la afectación en la obra de la ronda se adoptarán una vez que se tengan todos los informes sobre el valor de las dos grutas. Una de ellas, la de mayor tamaño, está en un lateral del trazado, en el espacio que ocuparía el acerado y el carril-bici, mientras que la más pequeña, la que tiene mayor valor arqueológico porque aquí han aparecido huesos y un útil de piedra, quedaría en la calzada de la ronda y tiene mayor incidencia sobre el trazado de la vía.

Andrade insistió ayer en que habrá que esperar a tener todos los informes y no descartó cambios en el trazado si al final el resultado de la información recabada con el georradar y el informe sobre el valor patrimonial del hallazgo obligasen a su conservación. Los trabajos con el georradar los está haciendo la Ute adjudicataria del tramo de la ronda donde han aparecido las grutas por encargo de la Consejería de Economía e Infraestructuras.