Escoltado por todos los dirigentes principales de su partido y algunos miembros del Ayuntamiento de Madrid, Pablo Iglesias ha protagonizado otra "puesta en escena" para hacerse notar en los medios públicos que le acogen con facilidad, en un llamado "desayuno informativo", no en la Casa del Pueblo de su barrio sino en el hotel Ritz de Madrid ha aparecido recientemente el líder de Podemos, que ha sido presentado por su nuevo socio de coalición, Alberto Garzón , que con toda clase de elogios le ha servido para abrir la escena, en delirio de arrobo y fascinación" agradeciendo el enorme esfuerzo y valentía histórica que derrocha el líder de Podemos..

Pablo Iglesias micrófono en mano, atacó, saludando desde el centro de la mesa oratoria y dijo muy convencido, que su formación política, ahora denominada Unidos Podemos es "la única alternativa al Partido Popular" de cara al 26J. Diciendo de corrido que su deseo es ocupar en España el "espacio de la socialdemocracia" que, a su juicio, ha dejado vacante el PSOE.

Anunció también con rotundidad, su intención de quitarle la silla emplazando al Partido Socialista a estar "a la altura" del momento histórico, que según él se vive en España. Porque él manifestando su suficiencia en humildad histórica, dice que necesita un acuerdo con la vieja socialdemocracia. "Necesitamos una alianza con la vieja socialdemocracia, que nos permita abrir con ellos un debate de país", ha asegurado, y ha pedido al PSOE que mueva ficha y que le ha llegado la hora de elegir entre PP o Podemos. (al escribir esto me han entrado risas).

Tres semanas faltan para las elecciones generales-, ya hay encuestas de todo tipo y aún con resultados parecidos, a los de Unidos Podemos, tan en línea con sus aspiraciones (incluso acarician el "sorpasso" al PP). Isabel San Sebastián sugería al líder de esa candidatura una lista de ministrables para constituir un gobierno "del cambio" a imagen y semejanza de los que, para nuestra dicha, gestionan ya algunos de los principales ayuntamientos de España. Una experiencia semejante no puede desaprovecharse. Tamaña acumulación de aciertos merece alcanzar el vértice del poder político y regir, desde La Moncloa, los destinos de la Nación. Iglesias, Colau, Errejón, Bódalo, Monedero, "Kichi" y Carmena. ¿Qué mejor Ejecutivo?, se preguntaba la ilustre periodista.

Al frente de ese Ejecutivo no habría de estar otro que el propio Iglesias, precedido por sus firmes convicciones democráticas. ¿Quién mejor que él, rendido admirador del comandante Hugo Chávez, para conducir a España hacia la meta ya alcanzada por esa Venezuela que, según sus propias palabras, constituye "un referente fundamental, una alternativa y un ejemplo para el sur de Europa".

Albert Rivera acaba de visitar ese referente y se ha encontrado los supermercados vacíos y a los líderes de la oposición en la cárcel o incomunicados. Una alternativa, es innegable, a la libertad subvencionada de la que gozan aquí el líder morado y los suyos. Además los ERES de Andalucía le han roto el discurso a Sánchez, a ver si ahora puede ir al debate a cuatro y llamarle "indecente" a Rajoy, la lectura del acta de apertura del juicio oral contra casi una treintena de altos cargos de la Junta andaluza le hará pensárselo mejor.