Las principales obras del Fondo Estatal de Inversión Local, conocido como Plan E, se encuentran en su fase inicial a cinco meses de acabar el plazo dado por el ejecutivo central para terminarlas. No obstante, el alcalde en funciones, Cipriano Madejón, aseguró ayer en un balance de las 71 obras con cargo a este plan estatal, que supone una inversión de 16 millones de euros, que los proyectos "van a buen ritmo" y que las obras que necesitan mayor plazo de ejecución "no se irán mucho más allá de principios de año".

En estos momentos solo faltan por iniciarse dos obras menores: la construcción de una báscula en Rincón de Ballesteros y la mejora de la pavimentación en los Castellanos, por problemas administrativos en ambos casos.

Madejón aseguró que "el grueso" de las obras estarán acabadas en los meses de octubre y noviembre. El decreto del Plan E establece que las obras tienen que estar finalizadas a 31 de diciembre y que si hay causas motivadas se podrá conceder una prórroga de hasta seis meses para su conclusión, lo que ocurrirá previsiblemente con las obras de mayor cuantía económica.

Concretamente se trata de la construcción del pabellón deportivo de Aldea Moret, con un importe de 1,3 millones de euros; instalaciones deportivas en Nuevo Cáceres, con un coste de 1,3 millones; la piscina de Rincón de Ballesteros, por 600.000 euros, o la pista deportiva y aparcamiento en superficie en la parcela de Los Fratres con una inversión de 500.000 euros. En todos ellos se ha iniciado el estudio del terreno y movimientos de tierra.

Este lunes comenzarán los trabajos en el terreno en otras dos obras importantes: la construcción de la casa del mayor en la calle Barrionuevo y la mejora de la pavimentación y redes del polígono industrial las Capellanías, para lo que se ha hablado con la asociación del mismo, Apilca, porque los trabajos repercutirán en el tráfico.

Por otra parte, Madejón, señaló que existen cinco proyectos que se iniciaron y que tuvieron que ser paralizados por distintos motivos. En esta situación se encuentran las obras de la plaza de la Soledad y el Duque, para no interferir en el tráfico, debido a que había otras obras próximas ya empezadas, las de reforestación de Rincón de Ballesteros, por riesgo de incendios, y las de la sede vecinal de Antonio Canales y la caseta de la policía local, por problemas técnicos.

El Plan E ya ha visto acabarse seis obras de menor envergadura como son la instalación de juegos infantiles en Aguas Vivas, la mejora de la red de saneamiento en la estación de Arroyo-Malpartida, el encauzamiento de las aguas fluviales en la ronda norte y la mejora de la avenida Ramón y Cajal y la calle La Habana.