La tormenta política desatada ayer en Andalucía en la carrera por la capitalidad cultural de Málaga y Córdoba beneficia las opciones de Cáceres para el 2016. La candidatura cacereña gana enteros como tercera vía al conflicto entre ambas ciudades andaluzas.

La polémica nació de la consejera de Cultura del Gobierno andaluz, Rosario Torres (PSOE), quien "apostó" el pasado domingo por la candidatura de Málaga a ser Ciudad Europea de la Cultura. Torres añadió que la Junta de Andalucía "no ha sido nunca neutral con relación a equipar Málaga para que pueda ser capital cultural". Estas declaraciones causaron un profundo malestar en Córdoba donde su alcaldesa Rosa Aguilar (IU) exigió de inmediato una rectificación, tras el apoyo ofrecido tiempo atrás por el presidente Manuel Chaves y la exconsejera Carmen Calvo, ahora ministra de Cultura.

Sin embargo, Rosario Torres, anterior delegada de Cultura de la Junta andaluza en Málaga, matizó ayer su respaldo y dijo que el Gobierno andaluz "mantendrá una activa neutralidad" sobre las dos candidaturas y las que se puedan presentar por otras ciudades andaluzas.

A pesar de ello, la alcaldesa de Córdoba aseguró que la consejera le había explicado que "se habían malinterpretado sus palabras y que ella en ningún momento había hecho esas declaraciones", sobre un supuesto apoyo a Málaga, informa Efe.

En este sentido, Aguilar señaló que Córdoba "ya tiene el apoyo expreso" del presidente andaluz Manuel Chaves y pidió a la Junta de Andalucía que cumpla sus compromisos en lo referido a equipamientos y actividades.

ALEGRIA MALAGUEÑA El aguacero político también salpicó a Málaga donde su alcalde, el popular Francisco de la Torre, se mostró "encantado" por el apoyo de la consejera, algo que "es una rectificación de lo expresado en su día por Carmen Calvo, que era claramente partidaria de Córdoba". El regidor aseguró a Europa Press que se conformaba con "la neutralidad activa" a la que aludió Manuel Chaves.